Petra Vlhova amarga el récord de Shiffrin en el cautivador eslalon nocturno de Flachau

Los nervios ya no pesan sobre los esquís de Mikaela Shiffrin. Tras atrapar el domingo el récord histórico de 82 victorias de Lindsey Vonn en la Copa del Mundo de esquí alpino, es mera cuestión de tiempo que lo supere. Con unas posibilidades infinitas, será ella misma quién ponga el listón allá donde desee. Mientras eso sucede, la competición sigue su curso y la eslovaca Petra Vlhova ganó este miércoles el cautivador eslalon nocturno de Flachau (Austria) con una exhibición de poderío, tras 10 meses sin lograr una victoria. La estadounidense no cometió ningún error, al contrario, volvió a demostrar que la perfección existe. Sin embargo, el cronómetro no entiende de técnica, sino de la velocidad, y terminó segunda. La alemana Lena Dueer aprovechó el traspié de la croata Zrinka Ljutic para cerrar el podio.

Flachau es una de las carreras más atractivas del campeonato. No solo porque se disputa de noche, sino por el encanto de la pista Griessenkar. Es única, una lengua recta donde el trazado se ve de principio a fin. Eso se traduce en que los aficionados se agolpan a lo largo del recorrido y decoran la competición con un entusiasmo singular. Porque si algo tienen los austríacos es que vuelcan como pocos con este deporte y este miércoles se congregaron más de 13.000 personas para ver la prueba, indicó la Federación Internacional de Esquí (FIS). Además, la estación de Salzburgo celebró este miércoles su 30 aniversario en el circuito blanco, una efeméride para redondear una jornada en la que se vio un esquí brillante. 

Un primer trazado muy exigente

Que la pista sea recta no le quitó dificultad al eslalon. Todo lo contrario, el desnivel máximo fue del 53%. Encima, el marcaje de la primera manga fue técnicamente exigente, con figuras (dobles y triples) colocadas en lugares estratégicos, como son los llanos y los cambios de pendiente. De ahí que mantener la centralidad, pero, sobre todo, una línea de curva y una fluidez en los cambios fueran clave para mantener la velocidad durante toda la bajada.

Vlhova lideró el ejercicio con solvencia y con un tiempo de 55,90 segundos, seguida de Shiffrin (+0,17 segundos) y de una sorprendente Ljutic (+0,58), que salió con el dorsal número 17. En los corrillos del circuito blanco se afirma que la joven croata de 18 años es la sucesora de su compatriota Janica Kostelic, campeona olímpica y clara dominadora de la disciplina en los años 2.000.

Segunda manga más clemente

La nieve caída durante la mañana garantizaron unas óptimas condiciones para la segunda manga, que además fue más clemente que la anterior en cuanto a marcaje se refiere. Aunque eso no evitó que algunas esquiadoras del 'Top 10' no cruzaran la línea de meta, como Sara Hector y Anna Swenn Larsson. Un caballito en una de las puertas más fáciles del trazado también privó de ver el potencial de Ljutic.

Shiffrin tenía que ser un pincel para superar a Vlhova. Sin embargo, quiso anticiparse más de la cuenta, lo que le impidió ser tan fluida como de costumbre y, por ende, perdió velocidad. En cambio, la eslovaca fue más precisa en los cambios de curva, demostrando que los pequeños detalles marcan, y más en un deporte como el esquí. Finalmente, Vlhova firmó un tiempo de 1:51.95 y fue 43 décimas de segundo más rápida que la reina universal de las nieves (1:52.38). Dueer, tercera, marcó 1:52.80.

Shiffrin se plantea descansar

Después de siete carreras en 15 días, y de ganar seis, Shiffrin planea tomarse un respiro y saltarse las carreras de velocidad de este fin de semana en St. Anton (Austria), indican fuentes del corrillo del circuito blanco. De esta manera, regresaría para las pruebas de descenso y super gigante del 20 al 22 de enero en Cortina d'Ampezzo (Italia) para así encarar la recta final de la temporada antes de los Mundiales, que se celebran a partir del 6 de febrero en Courchevel-Meribel (Francia).