La montaña de los 48 ciclistas

José Joaquín Rojas, murciano y amigo de Alejandro Valverde, lleva ya unos cuantos años residiendo en Andorra. Es uno de los más veteranos y de los que mejor se ha integrado en el pequeño país pirenaico entre los 48 profesionales que allí residen y que forman el mayor pelotón de corredores y estrellas que hay en el mundo. A él, como al resto de residentes, sin carreras, sin posibilidad de salir a la carretera a entrenar, le pilló el confinamiento en el Principat, sin que hasta este lunes pudiera sentir de nuevo el aire en la cara a los mandos de su bicicleta.

Pero, como a los otros 47 'andorranos' y a diferencia de los ciclistas profesionales que continúan viviendo en España, las limitaciones para entrenar son máximas y con las mayores precauciones. Valverde, Mikel Landa y tantos otros que no han querido cruzar los Pirineos para vivir, desde este lunes, pueden surcar las carreteras de su provincia sin limitación horaria, todo lo contrario de lo que ocurre en Andorra. "Por ahora aquí solo nos dejan salir a los profesionales, que somos 48, pero tenemos que hacerlo en dos grupos, a días alternos. Sales un día y descansas al siguiente", así lo cuenta Rojas.

Horario obligatorio

Solo tienen una montaña para subir y bajar a lo largo de dos horas, lo que supone un par de ascensiones. La cima escogida es el Coll de Ordino, tantas veces transitada por el Tour, la Vuelta y la Volta. Pero deben hacerlo en un horario que no pueden saltarse, desde las 11 de la mañana hasta las 14 horas. "Tenemos dos puntos de partida, adonde debemos llegar en coche y con la mascarilla puesta", añade Rojas.

En efecto, al menos en las próximas dos semanas, cada grupo de 24 corredores se subdivida a la vez en 12 ciclistas, unos se irán hacia Ordino y los otros a Canillo, dos de las parroquias o municipios andorranos, donde tienen habilitado un aparcamiento para dejar el coche. No pueden ir ni en pareja y tienen que distanciarse al máximo cuando se produce un adelantamiento, ya que salen con unos minutos, intercalados, tal cual se tratase de una cronoescalada aunque sin competir.

La montaña de Alaphilippe

El Coll de Ordino se volvió a disfrazar de uniformes ciclistas, de profesionales como Julian Alaphilippe, el gran animador del Tour del 2019 y que espera, como el resto de profesionales y la gran afición a este deporte, que la pandemia esté controlada a finales de agosto en Europa y pueda celebrarse la ronda francesa en las mejores condiciones posibles.

La Grande Boucle ha sido reprogramada para disputarse entre el 29 de agosto y el 20 de septiembre por el mismo recorrido, desde Niza a París pasando primero por los Pirineos y después por los Alpes, que estaba preparado para este julio, un mes que será algo así como un diciembre sin Navidad. "Las autoridades andorranas nos han pedido a todos que respetemos las distancias de seguridad y que los entrenamientos sean individuales", explica Rojas.

Bernal se fue a Mónaco

En el primer día de libertad por Ordino salieron también ciclistas como Enric Mas o Iván Cortina. Hace un año los profesionales llegaron a ser 52 pero el pasado verano la mayor representación colombiana, encabezada por Egan Bernal, cambió de destino, de Andorra se han dirigido a Mónaco, donde reside también Nairo Quintana cuando no está en Suramérica, como ahora. Así que al menos en las próximas dos semanas escalarán y bajarán por Ordino corredores de la talla de Adam y Simon Yates, Dan Martin, Rohan Denis, Luis León Sánchez o Marc Soler, por citar algunos de los 48 'andorranos' del pelotón.