RUGBI

La agresión de O'Brien a Papé sacude el Mundial de rugbi

CHRISTIAN MARTÍNEZ / BARCELONA

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La Copa del Mundo de rugbi, que se disputa en Inglaterra, ha vuelto a vivir un nuevo episodio cargado de polémica. En el encuentro que enfrentó a Francia e Irlanda el domingo, Sean O’Brien propinó un puñetazo en el abdomen a Pascal Papé, una acción que el colegiado no vio.

El seleccionador francés, Phillippe Saint André, mostró su enfado tras la finalización del encuentro y se preguntó por qué motivo el colegiado encargado de la televisión no mostró al principal la agresión. "Tengo una idea sobre el tema, mis jugadores también, espero que la próxima vez el árbitro haga su trabajo", acabó sentenciando el técnico. 

Con cuentas pendientes

La tensión entre ambas selecciones se hizo palpable el pasado mes de febrero, durante la disputa del Seis NacionesPapé fue sancionado entonces con 10 semanas tras propinar un golpe con la rodilla en la espalda de Jamie Heaslip, que acabó seriamente lesionado a raíz de la fractura de varias vértebras. Tras el intercambio de papeles, el mundo del rugbi vive expectante a la espera de conocer este martes cuál será la sanción para O’Brien.

Además, por si no fuera poco, el conjunto irlandés se encuentra bajo mínimos para afrontar la parte crucial de la Copa del Mundo. A la conocida baja de Peter O’Mahonny Jared Payne, este martes se ha hecho oficial la del capitán Paul O’Connell, que será operado esta semana y será baja para lo que resta de Mundial. El seleccionador irlandés, Mick Kearney, ya ha hecho extensible su preocupación sobre las ausencias: "Teniendo en cuenta el número de bajas que tenemos, espero que no haya sanción", ha dicho. 

Caso similar

La selección de Irlanda seguirá muy pendiente de lo que decida el Tribunal Independiente de la Federación Internacional de Rugbi, que ya se pronunció sobre un hecho producido en este Mundial de Inglaterra. En el partido que disputaron Nueva Zelanda y ArgentinaMariano Galarza fue sancionado con nueve semanas tras contactar con los ojos del neozelandés Brodie Retallick. Alegó que la sanción era por cometer "actos que atentan contra el espíritu competitivo".

Con todas las miradas puestas en el Tribunal y con los antecedentes mostrados, el Mundial de Inglaterra vive con atención su particular polémica.