UNA ENFERMEDAD INESPERADA GOLPEA AL BALONCESTO AZULGRANA

Conmoción por Mickeal

El vestuario del Barça Regal intenta digerir la baja de su figura y se conjura para superarla

EL PERIÓDICO
BARCELONA

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El vestuario del Barça Regal trata de digerir como puede la noticia sobre la baja para lo que resta de temporada de Pete Mickeal. La confirmación de que el alero estadounidense, de 35 años, sufre un tromboembolismo pulmonar -la misma enfermedad que, a principio del 2011, le obligó a estar más de seis meses de baja-, ha caído como un mazazo entre sus compañeros.

Es un golpe anímico en lo personal: por la excelente relación de Mickeal con el resto del vestuario, al que llegó hace cuatro temporadas. Pero también supone un revés difícil de encajar en lo deportivo, ya que el alero estadounidense es una pieza clave en los esquemas de Xavi Pascual. Tras un inicio irregular, Mickeal estaba rindiendo a un gran nivel, como prueba su elección como MVP en la final de Copa lograda en febrero en Vitoria.

«Es un golpe muy duro y una lástima, porque Pete es un jugador insustituible», valoró ayer el capitán del equipo, Juan Carlos Navarro, reflejando el sentir de la plantilla. «Es una baja muy importante pero lo más importante también es que él se recupere. Todo el mundo tendrá que dar un poquito más para sustituir a un jugador como él que es un referente, alguien con tanto carácter como él».

«Cuando me enteré de la noticia se me cambió la cara», admitió, por su parte, el base Víctor Sada. «Es muy duro para él, para su familia y también para su entorno, del que nosotros somos una parte. Estamos jodidos porque es una noticia muy mala, después de todo el esfuerzo que había hecho para ponerse bien otra vez. Eso es lo más importante, más que pensar ahora en el baloncesto y preguntarse si nos quedamos cojos con su baja».

Después de los primeros momentos de conmoción por la noticia, la sensación general en el vestuario azulgrana es de alivio. De no haberse detectado en las pruebas médicas, la vida de Mickeal habría estado en peligro. El tromboembolismo pulmonar se desencadena por la obstrucción arterial del pulmón debido a un trombo. La obstrucción tiene como consecuencia la escasez de oxígeno en los pulmones y, en caso de que el trombo llegue al corazón, puede provocar un infarto. No es una enfermedad fácil de detectar. Pero el malestar de Mickeal antes del partido de Liga del pasado sábado en Sevilla y sus precedentes alertaron a los médicos del club.

Reposo absoluto

El jugador se encuentra en su hogar, en reposo absoluto, para evitar cualquier complicación, y se le están aplicando inyecciones de heparina para diluirle la sangre y reducir el riesgo de trombos. Los médicos del club aún no han determinado los pasos a seguir.

Su recuperación, en cualquier caso, será un proceso largo. En el 2011 estuvo cerca de seis meses entre que se le diagnosticó la enfermedad en el mes de febrero, y regresó a las pistas en la pretemporada azulgrana. A los cuatro meses, Mickeal se entrenaba con el resto del equipo, pero el club optó por la continuidad de Alan Anderson y mantuvo al alero de Rock Island de baja. En contra de Mickeal, que acaba contrato el 30 de junio, juega su edad, que puede hacer aún más dura su vuelta.

El Barça, de momento, ha dado de alta a Joe Ingles en la Liga (en las últimas semanas el alero australiano solo estaba inscrito en la Euroliga) y valora la llegada de un refuerzo, aunque ya solo podría inscribirse en la ACB. «Creo que tenemos una plantilla larga y tenemos equipo de sobras para optar a todo. Hemos tenido que aprender a jugar sin Navarro y ahora tendremos que hacerlo sin Mickeal», apuntó Sada, que cree que el equipo debe dar un paso adelante, especialmente Ingles y Rabaseda, que ocupan la misma posición. «Hay que tirar adelante por Pete y porque somos un equipo y hay que ir a por todas», añade. «Para nosotros es insustituible. Es un grande y seguro que lo echaremos de menos. Pero cada uno de nosotros va a tener que dar un poco más; estas situaciones sirven para unirnos», concluye Erazem Lorbek.