TERRITORIO VINTAGE

Cuando la Cienciología (mal)casó a Tom Cruise y Katie Holmes

La actriz dio el sí al novio de América hace 15 años sin pensar que en aquel matrimonio serían tres. La Cienciología se encargó de lanzar por la borda su carrera y dar argumentos para salir corriendo.

Holmes Cruise

Holmes Cruise

Natalia Araguás

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Corría 2005 cuando el amor se apoderó con furor adolescente de Tom Cruise, a sus 42 años: hacía 20 que 'Top Gun' lo había convertido en el novio de América y, por ende, del mundo entero. El actor saltó sobre el sofá de Oprah Winfrey, se encaramó a la Torre Eiffel para pedir la mano de Katie Holmes, de 26 años. Eligió París por ser "muy bonita y romántica".

Dos francotiradores y más de 300 guardias velaron por la seguridad de los novios en el castillo de Odescalchi en Bracciano. El enamoramiento vivió, de tópico en tópico, su culminación a orillas de un lago italiano. Una boda de tres días con el pueblo enfebrecido. Jennifer López y Marc Anthony, los Beckham, los Travolta, Will Smith, Brooke Shields y Jim Carrey brindando por la pareja, vestida de Armani. Un gato y un peine de regalo para Holmes, según el rito de la Cienciología: el máximo responsable de esta iglesia y mejor amigo de Tom Cruise, David Miscavige, le llevó hasta el altar. 

Fugaz noviazgo

Quién quería acordarse de Nicole Kidman, alzando los brazos hacia cielo, triunfal, tras salir en 2001 con los papeles del divorcio recién firmados. Quién quería aguar el sueño infantil de Katie, casarse con Tom Cruise, con rumores de que el actor había convocado hasta un casting para buscar nueva esposa. Otra vez soltero, le acechaban las habladurías sobre su presunta homosexualidad, su esterilidad o su excéntrica personalidad subyugada a la Cienciología. El amor había triunfado y Katie, ya Cruise, cuidaba de su hija, Suri, nacida al poco del fugaz noviazgo. 

La prometedora carrera de la actriz, ídolo adolescente en EEUU con la serie 'Dawson crece', quedó truncada. Ser la novia de Tom Cruise le supuso dejar a Batman. Los inicios de su idilio con el actor coincidieron con la promoción de 'Batman Begins', donde interpretaba a Rachel Dawes, la amada del superhéroe desde la infancia. En la siguiente película de la saga, 'El Caballero Oscuro', el director Christopher Nolan la sustituyó por Maggie Gyllenhaal, con la que guarda cierto parecido físico.

Comedias de medio pelo

"Katie no estaba disponible para el papel, lo cual no me alegró mucho, pero estas cosas pasan", se encogió de hombros Nolan. Un portavoz de Holmes alegó "dificultad de compaginar el trabajo con otras obligaciones". Cobró fuerza la tesis de que al director le molestó ver la promoción de 'Batman Begins' reducida a un catálogo de carantoñas. Lo cierto fue que Holmes pasó de 'partenaire' de Christian Bale a darle la réplica a Josh Duhamel en comedias de medio pelo como' The Romantics'.

Tom Cruise siguió adelante, sin más daños aparentes que sufrir el escarnio de 'Scary Movie 4', que se cebó con su entrevista con Oprah. Hizo la transición de pícaro galán del brazo de mujeres mayores que él –su matrimonio con Mimi Rogers como epítome– a seductor héroe de acción en la senda de 'Misión Imposible', tras casarse con bellas actrices más altas. Seguía siendo un mito sexual y uno de los actores mejor pagados del mundo: había ganado 75 millones de dólares solo en 2011, estimó 'Forbes'. Katie, profesionalmente tocada y hundida, se enfrentó un año después al divorcio.

Huida a Nueva York

La actriz voló entonces a Nueva York con su hija Suri para protegerla de la Cienciología y de la voraz atención mediática que suscitaba. Holmes lo recuerda como una época intensa, en que solía llevar a la niña al parque a las seis de la mañana para esconderse de los paparazis.

"Como persona pública, siempre he recibido mucha atención en distintos periodos de mi vida", reflexionaba en una entrevista en 2020 en 'Instyle' sin mencionar a Cruise, el innombrable. "Y cuando tienes tanta atención, a menudo no quieres ni salir de casa porque es demasiado. Puedes sentirte consumida por lo que la gente diga, pero de repente decides hacer las cosas en tus propios términos. Me siento como si hubiera conseguido resolverlo todo", reivindicaba Holmes, más allá de los 40. Con Suri ya adolescente, iba a dirigir su segunda película tras su debut con Todo lo que teníamos, las previsibles cuitas de una madre coraje. En la entrevista se postulaba para nuevos proyectos. 

Ahora bien: si las evoluciones de su vida sentimental eran antes las que copaban el papel cuché, ahora lo hacen sus estilismos, más que sus méritos cinematográficos. Holmes vivió su momento de gloria en 2019 tras aparecer con un sostén de cashmere, con cárdigan a juego, de la de la firma Khaité: más de 500 dólares el sujetador y se agotó en una hora, 1.500 euros aparte la chaqueta.

Holmes deslumbraba con el atuendo, que copió Zara, tras su ruptura con el actor Jamie Foxx. Tampoco cuajó su relación con el empresario Emilio Vitolo Jr., propietario de varios restaurantes en Nueva York. Después de Cruise, ni el amor ni el cine le han vuelto a sonreír. Ya va siendo hora de romper la mala racha.

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