Una voz televisiva

Muere Ángel María de Pablos, la voz del ciclismo en los años 80

El periodista y escritor fallece a los 82 años en Valladolid donde había ejercido toda su etapa profesional. Debuto en TVE con la retransmisión de la famosa Vuelta de 1983.

Angel María de Pablos, en una imagen de archivo

Angel María de Pablos, en una imagen de archivo / X / Óscar Puente

Sergi López-Egea

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Hubo un tiempo en el que no existía internet, ni había recursos que en apenas segundos permiten nutrirse de detalles para que una crónica o una retransmisión deportiva vaya más allá de lo que se ve en la pantalla, o de contar lo que ha sucedido estrictamente en un campo de fútbol, una cancha de tenis o baloncesto, o una carretera cerrada al tráfico y ocupadas por ciclistas.

Ángel María de Pablos, fallecido este miércoles en Valladolid a los 82 años, fue el ‘culpable’ (así entre comillas) de llevar las retransmisiones ciclistas al margen de explicar que se estaba produciendo una fuga, que el favorito había atacado o que todo apuntaba a que un esprint iba a decidir la victoria de la etapa.

De Pablos fue muchas cosas en el mundo del periodismo, el deporte y la cultura, sobre todo en su Valladolid natal. Llegó a ser amigo de Miguel Delibes y ambos, aparte de la literatura, compartían un tremendo amor al deporte de las dos ruedas. Hasta principios de los 80 De Pablos era una de las firmas más importantes del diario ‘El Norte de Castilla’, del que llegó a ser responsable de la sección de deportes, impulsada bajo consejo del propio Delibes. Y entonces se incorporó al área territorial de TVE en Castilla y León para recibir posteriormente un encargo que lo impulsó a la cima de la popularidad televisiva.

La Vuelta de 1983

El año 1983 marcó un nuevo camino al ciclismo en España. TVE apostó por retransmitir en directo la Vuelta. Y no fue una ronda española cualquiera, sino una edición histórica, la que descubrió los Lagos de Covadonga y que siempre será recordada por el extraordinario duelo entre Bernard Hinault y Marino Lejarreta con un Julián Gorospe que sucumbió, entre el llanto de los espectadores, camino de Ávila, mientras el astro francés ponía la carrera patas arriba.

TVE puso la retransmisión de la carrera en las manos y sobre todo en la voz de Ángel María de Pablos con la ayuda de Emilio Tamargo, fallecido en su Oviedo natal en 2009. Y llegó un nuevo método de comentar el ciclismo, donde la cultura se mezclaba con la narración deportivo. Los ciclistas no sólo ascendían un puerto, circulaban por una carretera determinada, superaban la meta volante en un pueblo, sino que esa localidad no era una villa cualquiera porque tenía su cultura, su vida cotidiana… y todo gracias a los comentarios de De Pablos. La voz llegó cuando el ciclismo español comenzaba a renacer, años después de la retirada de Luis Ocaña, en las primeras pedaladas de un chico de Segovia, llamado Pedro Delgado, y del que ya había escrito maravillas en ‘El Norte de Castilla’.

De Pablos fue siguiendo la Vuelta y el Tour, principalmente, cuando Delgado iba poco a poco convirtiéndose en un aspirante a la victoria que logró en 1988. Vino luego el relevo en TVE con Pedro González, fallecido prematuramente en la madrugada del 1 de enero de 2000, y después, hasta la actualidad, con la llegada de Carlos de Andrés y con Perico siempre a su lado. De Pablos marcó el camino a seguir como el líder televisivo que cruzó la cumbre del Tourmalet en primera posición.