Confesiones en 'Planeta Calleja'

Ángel León: "Las cuentas de Aponiente no salen"

"Tengo que salir fuera a ganarme la vida, hacer muchos bolos", explica el chef del mar, con tres estrellas Michelin por su restaurante, que tiene 70 empleados para servir a un máximo de 30 personas

El cocinero revela que pierde "casi 60.000 euros" por cada mes que tiene cerrado el negocio, que reabrirá en marzo después de más seis meses con la persiana bajada

Ángel León, estirado, charla con Jesús Calleja en el desierto de Dubái durante uno de los momentos del episodio de 'Planeta Calleja' protagonizado por el cocinero gaditano.

Ángel León, estirado, charla con Jesús Calleja en el desierto de Dubái durante uno de los momentos del episodio de 'Planeta Calleja' protagonizado por el cocinero gaditano.

Cata Mayor

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Ángel León luce tres estrellas Michelin por Aponiente, pero eso no significa que se gane la vida con el restaurante. Al contrario. "Las cuentas no salen. Tengo que salir fuera a ganarme la vida, tengo que hacer muchos bolos, ir a la tele, 'p'arriba', 'p'abajo'. Solo una temporada salieron los números", ha explicado el cocinero gaditano a Jesús Calleja durante su viaje a Dubái para el programa 'Planeta Calleja' que ha emitido Cuatro.

El chef del mar justifica la imposibilidad de cuadrar los números cuando explica que puede dar de comer a un máximo de 30 comensales y tiene a 70 personas en plantilla. Una infraestructura demasiado costosa que la mayoría de restaurantes con tres estrellas difícilmente pueden soportar si no es generando ingresos en otros negocios. David Muñoz, por ejemplo, ha subido el precio de su menú degustación en Diverxo para, entre otros motivos, hacer más sostenible el negocio.

La llegada de la pandemia ha sido la puntilla para León. Seis meses cerrado llevaba cuando voló a Dubái, y no volverá a abrir Aponiente hasta marzo. Cada mes con la persiana cerrada le cuesta "casi 60.000 euros". "Pero nos recuperaremos, por supuesto. Y no solo yo, también el de la cafetería y el del chiringuto. Todos los hosteleros. España necesita alegría y que les demos de comer, y nosotros hacemos feliz a la gente", proclama con convicción y entusiasmo.

Durante su periplo, en el que ha rodado en bici y ha conducido un buggy en el desierto, el chef del mar ha explicado que, pese a tener el restaurante cerrado, siguió cocinando para los más necesitados en lo más duro de la pandemia. "Fue una de las experiencias más bonitas de mi vida. Dimos gratis de comer gracias a voluntarios anónimos que no pidieron nada a cambio cuando había tanto miedo, y todos íbamos con guantes, mascarillas y batas. Me olvidé de mis problemas y me puse a trabajar para los demás".

León, que se siente "orgulloso de no haber tenido que pisotear, gritar ni joder la vida a nadie para estar donde estoy", ha explicado a Calleja que entre los chefs triestrellados manda el buen rollo ("nos llevamos de puta madre, superbien, pero mirando por el retrovisor lo que hace uno y otro porque eso te mantiene en la brecha") y que, a menudo, emocionado, comparte sus descubrimientos con muchos colegas, como Joan Roca y Andoni Luis Aduriz. Precisamente el cocinero vasco le parece "el chef más creativo, un superdotado": "Te sientas en Mugaritz y te destroza la cabeza con un discurso que no te da nadie y te replanteas muchas cosas como cocinero".

Lo que tiene claro es que el mundo de la gastronomía está viviendo una burbuja, "un globo", como en su día pasó con la construcción. "Pinchará y todo se pondrá todo en su sitio. Nunca vi lógico que yo esté continuamente en la prensa y mi padre, que fue médico [experto en transplante de médula ósea] y que salvó vidas no tuvo ni una fiesta de despedida cuando se jubiló tras 40 años dedicado a los enfermos. Tenemos una sociedad muy endeble. Hay gente mucho más transcendente que los cocineros".

León no es el único cocinero que estos días ha estado fuera de España de 'aventura'. Alberto Chicote y Paco Roncero han compartido un viaje al Parque Nacional de Yellowstone (EEUU) para hacer fotos a animales salvajes.