Martes, 8 de enero del 2013 Jaume Rovira (Barcelona)

Leyendo la prensa de estos últimos días nos podemos encontrar con tres noticias que indignan a toda persona que crea todavía en la justicia, la solidaridad y la fraternidad entre los humanos. Vemos que en Barcelona las desigualdades se incrementan, y hoy los barrios más ricos tienen una renta siete veces superior a los más pobres. El señor Rodrigo Rato, después de hundirse Bankia, ha sido contratado por Telefónica con un sueldo de 200.000 euros al año. Y finalmente conocemos que en Francia los más ricos se espabilan para pagar menos impuestos, como es el caso de Gerard Depardieu, que encuentra ejemplar la democracia rusa con su tope del 13% de imposición fiscal. Mientras la mayoría sufre la crisis, se incrementa el paro, se debilita el Estado del bienestar, algunos se aprovechan y no se esconden, nos reafirman en aquello de que no es una crisis, es una estafa. Hoy un fantasma recorre Europa, el de la impunidad de los poderosos. ¿Estamos aún a tiempo de pararlos?

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