Los Mossos refuerzan la vigilancia en la Sagrada Família y otros puntos de Barcelona por Semana Santa

Los Mossos d'Esquadra refuerzan la vigilancia activa y el patrullaje preventivo en la Sagrada Família y en otros puntos turísticos de Barcelona por Semana Santa. Así lo han confirmado fuentes de los Mossos d'Esquadra este lunes a EL PERIÓDICO, que enmarcan el dispositivo en el conjunto de medidas antiterroristas ya previstas para la Semana Santa y su intensificación tras el ataque terrorista en Moscú (Rusia) el viernes.

La decisión de incrementar el despliegue sobre el terreno se decidió el viernes en la Mesa de Evaluación terrorista del Estado, en la que participó el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, así como representantes de los distintos cuerpos de seguridad y emergencia españoles. El paquete de medidas antiterroristas quedó activado ya el pasado viernes, en vista del incremento de aglomeraciones en la vía pública durante la Semana Santa por turismo, vacaciones escolares y actos religiosos como procesiones.

Fuentes policiales han señalado a Europa Press que cada año durante estas fechas hay "un refuerzo previsto en todas las estructuras críticas, transportes y zonas monumentales". El objetivo es controlar las zonas donde puede haber "más afluencia de personas locales y turistas", para poder actuar con rapidez ante cualquier tipo de incidente o amenaza. El templo de Gaudí, por ejemplo, congregó este viernes a unas 700 personas por su concierto de Pascua y muchas más las noches del domingo al martes ante la fachada de la Pasió para ver un espectáculo de luz y sonido gratuito.

Según avanzó el ministro Marlaska el miércoles, Interior ha pedido a las policías prestar especial atención a las procesiones de todas las capitales de provincia, a playas, grandes centros comerciales, medios de transportes y espacios donde haya eventos multitudinarios. El refuerzo se prevé mantener, por ahora, hasta las 3 de la tarde del próximo martes 2 de abril.

El ataque de Moscú

Los cuerpos de seguridad de los estados europeos redoblaron las alertas tras el atentado del pasado viernes en el Crocus City Hall de Moscú, en la capital rusa, que por el momento ha dejado al menos 137 muertos y un centenar de heridos. Se trata del ataque el más sangriento en la ciudad desde que separatistas chechenos secuestraran a los asistentes del teatro Dubrovka en 2002, una tragedia que acabó con 170 muertos.

Otras ciudades occidentales también están adoptando mediadas de seguridad tras el episodio, atribuido a Estado Islámico. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha afirmado que "estos últimos meses" ha habido "varias tentativas" de atentados en suelo francés por parte de Estado Islámico, por lo que se ha establecido la alerta máxima en este país "como medida de precaución".

Bélgica e Italia elevan la precacución

Por su parte, las autoridades de Bélgica también han decidido este lunes mantener en una escala de 3 sobre 4 su nivel de alerta antiterrorista tras el atentado en Moscú. El nivel de alerta en Bélgica se mantiene en el nivel 3, lo que quiere decir que hay una amenaza "grave y probable", indicó el lunes a la agencia Belga un portavoz del Órgano de Coordinación para el Análisis de las Amenazas (OCAM). De momento, indicó que no está previsto pasar al nivel 4, el máximo, como en Francia.

También el Ministerio del Interior italiano ha decidido intensificar las medidas de vigilancia después del ataque, tras una reunión este lunes del Comité nacional para el orden público y la seguridad, ante la celebración de la Semana Santa. "Se llevó a cabo un análisis cuidadoso del ataque terrorista en Moscú con el fin de actualizar las medidas de prevención antiterrorista que ya están en vigor", informó el ministerio italiano.