Impuesto turístico

PSC y ERC pactan que la Copa América genere 10 millones de inversiones para la Barceloneta

Ambas fuerzas acuerdan que el "retorno social" de la competición no se restrinja a obras a efectuar solo en 2024 y rebajan la petición de que se cedan edificios del Estado a Barcelona

ERC reclama 10 millones de inversión municipal en la Barceloneta como retorno social por la Copa América

Viviendas en una calle del barrio de la Barceloneta, en Barcelona.

Viviendas en una calle del barrio de la Barceloneta, en Barcelona. / MANU MITRU

Jordi Ribalaygue

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El PSC y ERC han pactado una proposición presentada por los republicanos para que la celebración de la Copa América en Barcelona arroje 10 millones de euros a través del recargo municipal al impuesto turístico y reviertan en inversiones en el barrio de la Barceloneta, el más próximo a las regatas de vela que se disputarán el próximo verano. El entendimiento se produce en medio de los contactos entre ambos partidos para cerrar un acuerdo de gobierno y se ha visualizado horas después de que el alcalde Jaume Collboni haya instado a la oposición a renegociar el proyecto de presupuestos para 2024, que el ejecutivo volverá a someter a la primera criba el martes que viene.

El plan para la Barceloneta ha contado también con respaldo de Barcelona en Comú y Junts, mientras que PP y Vox se han opuesto. Los retoques que el gobierno socialista ha introducido en la proposición de ERC han llevado a que se borre que el "retorno social" de la competición deba materialice por completo en 2024. Sin precisar un calendario para efectuar todo el gasto, el texto se compromete a "implementar medidas en la Barceloneta y otros barrios de Ciutat Vella".

El texto original de ERC pedía que el Gobierno de Pedro Sánchez ceda al Ayuntamiento los edificios del Estado situados en el paseo de Colom. La proposición citaba la junta de obras del puerto, la sede del sector aéreo del Ministerio de Defensa, el Gobierno Militar, la Comandancia Naval, la Capitanía General, el edificio de Correos y la antigua sede de la Delegación del Gobierno.

La petición se ha rebajado tras incorporarse la transacción de los socialistas. La propuesta que ha tirado adelante aboga por "continuar trabajando con el resto de administraciones públicas para movilizar y buscar un uso adecuado a los inmuebles de propiedad estatal del frente litoral y el Port Vell".

Espacio público y pisos turísticos

El resto de puntos se mantienen tal como los republicanos los presentaron días atrás. Se pide que la inversión financiada con el recargo al impuesto turístico aplicado a la Copa América produzca mejoras en las calles del interior de la Barceloneta y los espacios limítrofes del Port Vell para "destinarlos a usos vecinales".

A su vez, solicita "reforzar la inspección contra el mal uso de la vivienda, el acoso inmobiliario y los pisos turísticos ilegales". No obstante, el teniente de alcalde, Jordi Valls, ha señalado que resulta un "problema" que la mayoría de apartamentos en el barrio obtuvieron autorización años atrás. La saturación ha provocado periódicas protestas en el barrio.

La moción insta también a reforzar los controles a terrazas y prevenir botellones y ruido durante la competición. A su vez, requiere mejoras en el transporte público y explicita que debe remodelarse la salida de la parada de metro de la Barceloneta.

Valls ha señalado que el gobierno municipal trabaja en un plan de retorno específico para el barrio por la Copa América, dotado de momento con nueve millones de euros. "Seguramente se ampliará", ha augurado el teniente, que ha anticipado que incidirá en políticas de movilidad, seguridad, intervenciones extraordinarias de mantenimiento y apoyo al tejido asociativo.