Vivienda

Barcelona llega a tardar más de cuatro años en entregar pisos de emergencia a desahuciados

El PSC y los comunes se enzarzan por el desahucio de una inquilina de 78 años y los socialistas acusan a sus exsocios de haber dejado un “absoluto colapso” en políticas de vivienda

Desahuciada Blanca, la inquilina de 78 años que perdió su renta antigua por 88 euros

Intervención de los Mossos d'Esquadra durante un desahucio en Barcelona, en una imagen de archivo.

Intervención de los Mossos d'Esquadra durante un desahucio en Barcelona, en una imagen de archivo. / MANU MITRU

Jordi Ribalaygue

Jordi Ribalaygue

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El Ayuntamiento de Barcelona ha reconocido este martes que el retraso en facilitar pisos de emergencia a personas necesitadas de techo tras sufrir un desahucio llega a superar los cuatro años. La teniente de alcalde Maria Eugènia Gay ha precisado en la comisión municipal de derechos sociales que la entrega de viviendas a familias con solicitud aprobada en la Mesa de Emergencia y que requieren un domicilio con cuatro habitaciones conlleva “52,8 meses de espera”. La concejala del PSC ha culpado a Barcelona en Comú de haber generado un "absoluto colapso" en las políticas de vivienda durante el mandato de la exalcaldesa Ada Colau. A su vez, los dos exsocios se han enzarzado por el reciente desalojo de una inquilina de 78 años, Blanca, expulsada de un hogar de renta antigua del Gòtic por adeudar 88 euros a la propiedad por unas obras en la cocina.

“El tiempo de espera varía en función del tipo de vivienda que se necesita, si se necesitan uno, dos, tres o cuatro dormitorios”, ha expuesto Gay, que ha comparecido a petición de los comunes. La socialista ha concretado que la concesión de las llaves de un piso de una sola habitación a quien se acredita que lo requiere tarda “23,3 meses”. “Los pisos adaptados para personas con movilidad reducida tardan de 10,2 a 8,2 meses”, ha añadido. La Mesa de Emergencia acumula 682 familias con demanda aprobada y en lista de espera para acceder al domicilio al que se les reconoce que tienen derecho.

Ante la demora endémica que la Mesa de Emergencia acumula desde hace años, Gay ha estimado que la Generalitat adeuda “más de 1.300 viviendas en este momento” a la capital para saciar la demanda. A su vez, la teniente de alcalde ha rebatido las críticas que los comunes han dirigido al gobierno de Jaume Collboni, acentuadas tras el dealojo de Blanca.

Falta de plazas en pensiones

Gay ha negado que el consistorio haya modificado los requisitos para atender a personas en riesgo de desahucio. También ha desmentido que haya variado la concesión de ayudas económicas o de alojamiento en los casos en que se pierde el techo.

“Son los mismos criterios desde hace muchos años”, ha esgrimido la edila. Al mismo tiempo, ha reconocido la “dificultad de encontrar plazas en hostales y pensiones”, saturados para albergar de forma temporal a los desalojados.

En cambio, la concejala Carolina Recio (Bcomú) ha enfatizado que existe “preocupación de los movimientos sociales por el cambio de criterios” del consistorio. “Blanca es un ejemplo paradigmático y no es un caso aislado. No está en su casa, cuando había un preacuerdo”, ha recriminado. Recio ha juzgado que el protocolo para abordar los desahucios en la ciudad han cambiado por “un criterio político” y ha echado en falta “liderazgo político, sensibilidad, protección y seguimiento de los casos".

En la réplica, Gay ha arremetido contra la política de vivienda del gobierno de Colau, que ha juzgado un "fracaso". "Han dejado una situación alarmante y la emergencia habitacional, colapsada", ha afeado a Recio. La concejal de Bcomú ha recordado que los socialistas formaban parte del ejecutivo de Colau y ha afirmado que "80.000 personas" evitaron ser desahuciadas en el mandato anterior.