Conflicto vecinal

Un grupo de jóvenes tira piedras a los okupas de Bonanova, que responden con lanzamientos

Los Mossos han cortado el tráfico en las inmediaciones hasta controlar un episodio que ha finalizado sin heridos

Concentración plaza Bonanova frente a los bloques ocupados

Concentración plaza Bonanova frente a los bloques ocupados / EL PERIODICO

Marta López
Guillem Sánchez
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Los Mossos d'Esquadra han acordonado este miércoles sobre las 21.00 la plaza Bonanova después de que un grupo de jóvenes haya lanzado piedras contra las okupaciones de La Ruïna y El Kubo y los okupas hayan respondido lanzando globos de pintura y también alguna piedra, según fuentes de la policía catalana.

Los Mossos mantienen en el lugar patrullas de seguridad ciudadana de forma permanente desde el pasado lunes. Los agentes han presenciado lo sucedido y han intervenido para sofocar el episodio, que ha finalizado sin heridos. Unidades antidisturbios han acudido al lugar y los responsables del operativo han optado por cortar el tráfico para evitar cualquier percance.

La medida ha hecho correr el rumor en el vecindario de que una supuesta operación de desalojo era inminente. Pero según las fuentes policiales consultadas, nada ha cambiado al respecto. Los Mossos actuarán cuando un juez ordene el desalojo de 'La Ruïna', una circunstancia sin fecha conocida. Ya existe una orden para expulsar a los okupas de 'El Kubo' pero ambos edificios comparten espacio y para el cuerpo de seguridad no tiene sentido intervenir hasta que el espacio pueda vaciarse del todo. Una opinión compartida por el Ayuntamiento de Barcelona, que defiende que las okupaciones deben finalizar pero para ello es necesario hacerlo simultáneamente y por orden judicial.

La Sareb, propietaria principal de los dos inmueble, ha solicitado medidas cautelares al juzgado para que ordene a la policía catalana intervenir antes de que acabe un proceso judicial que aún puede durar algún tiempo. No consta, sin embargo, que el juzgado se haya pronunciado en ese sentido todavía.

En la plaza Bonanova, una hora después del incidente, permanecen un centenar largo de vecinos que lanzan gritos contra las casas okupadas, desde donde también hacen ruido de protesta, y entre los vecinos prevalece la impresión de que los okupas serán expulsados esta noche, una idea que ha inoculado el jefe de la empresa Desokupa, Dani Esteve, que ha desistido de tratar de expulsar a los okupas por su cuenta –una acción ilegal– pero que mantiene la llamada a manifestarse contra estos mañana jueves.

La jornada de mañana será la más complicada: se unirán dos manifestaciones de signo contrario dado que la convocada por Desokupa será respondida, presumiblemente, por otra de activistas autodenominados "antifascistas".