El Síndic de Barcelona critica a Desokupa por "crispar" y "romper la paz social" en la Bonanova

La Sindicatura de Greuges de Barcelona ha emitido un comunicado aludiendo a su "preocupación" por la situación de tensión que se está viviendo en el barrio de la Bonanova de Barcelona, después de que la conocida empresa Desokupa anunciara en redes sociales que "sí o sí" desalojará el próximo 11 de mayo a los habitantes de 'La Ruina' y 'El Kubo', dos fincas okupadas de la plaza de la Bonanova.

El Síndic de Barcelona, David Bondia, apela a "reestablecer la paz social en el barrio", criticando a Desokupa "generar crispación", "romper de manera no deseada la paz social" y "ocasionar un importante gasto público" por la intervención policial.

'La Ruina' y 'El Kubo' son dos fincas ocupadas que llevan varios años activas –desde 2019 la primera y desde 2016 la segunda– en uno de los lugares más distinguidos de la ciudad. Un periodo de tiempo durante el que no han generado problemas remarcables de convivencia.

Pero con la proximidad de la batalla electoral por el Ayuntamiento de Barcelona del 28 de mayo se han convertido en un tema central de la actualidad barcelonesa, que vivirá estos días, justo antes del inicio oficial de la campaña, su particular semana caliente. 

El Síndic de Barcelona, David Bondia, recuerda que "cualquier proceso de recuperación de la posesión de inmuebles tiene un recorrido legal, que debe ser ejecutado por las instituciones pertinentes, y no por particulares". De este modo, insiste Bondia, es como "se puede garantizar la seguridad de las personas y una actuación ajustada a derecho".

Responsabilidad del gasto público

En relación a la posible intervención de Desokupa, contra la cual ya se han pronunciado los Mossos d'Esquadra, el Síndic ratifica que "no está amparada legalmente".

"El resultado de desafiar a los poderes públicos, con la amenaza de procedimientos de desahucio que se apartan de lo establecido legalmente, no sólo está generando crispación y una ruptura no deseada de la paz social del barrio", apunta Bondia, sino que también "está ocasionando un importante gasto público", en relación al dispositivo específico de Mossos para intervenir contra la 'desocupación'.

"Las consecuencias de la provocación irresponsable de este gasto público deberían ser imputables a las personas y actores que han atizado este conflicto de orden público", zanja el Síndic.