Las medidas para reducir el ruido en Barcelona apenas funcionan en Gràcia

El ruido nocturno en Barcelona se ha reducido entre uno y cinco decibelios, en las zonas consideradas "acústicamente tensionadas", ha informado el ayuntamiento este lunes. En estos puntos, el gobierno municipal ha puesto en marcha distintas actuaciones como la reducción de los horarios de las terrazas o de tiendas de alimentación.

El pasado verano, el consistorio informó de que se estaba detectando que el ruido nocturno superaba continuamente en tres decibelios lo permitido, según los sonómetros instalados; aunque los máximos detectados superaban en más de 10 decibelios el ruido autorizado por la noche en más de una decena de los lugares en los que se colocaron estos aparatos.

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Gràcia, la zona con menos mejoras

Los ámbitos donde se han aplicado medidas para reducir el ruido son los siguientes:

• Plazas de Gràcia. La reducción de ruido nocturno ha sido de solamente entre 1 y 2,5 decibelios. Se trata del punto donde la disminución de las molestias ha sido más moderada, por lo que el ayuntamiento considera que existe una "necesidad de seguir desarrollando medidas para disminuir el nivel sonoro durante la noche".
• Calle de Enric Granados, en el Eixample. En la parte superior de la calle el ruido nocturno se ha reducido unos 2 decibelios, y hasta 5 en el tramo inferior.
• Calles de Joaquim Costa y La Paloma, en Ciutat Vella. El ruido ha disminuido unos 2 decibelos. En la plaza George Orwell, en el mismo distrito ha bajado unos 3,5 decibelios.
• Jardines de la Mediterránea, en Sants-Montjuïc. Se han reducido más de 5 decibelios los niveles de ruido nocturno.

Nuevas zonas controladas

El Ayuntamiento de Barcelona también ha informado que está estudiando cómo reducir el ruido nocturno en otros puntos de la ciudad. En este sentido, está elaborando planes específicos para las zonas del 'Triángulo lúdico' de Sant Martí; en las calles Allada Vermell y plaza de Sant Cugat del Born; en la calle Miquel Pedrola i Alegre de la Barceloneta; y en la plaza de la Virreina de Gàcia.

También se está analizando la calle Rogent del Clot; los ejes de Nou de la Rambla, Blai y Blesa, en el Poble Sec, y las calles de Tusset y Aribau, en Sarrià-Sant Gervasi.

Ruido y salud ciudadana

El consistorio recuerda que el ruido es "el segundo factor ambiental que más impacta en la salud de la población, justo por detrás de la contaminación del aire". En el caso de la capital catalana, según estimaciones de la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB), "más de 210.000 personas sufren una molestia intensa", que incluye afectaciones emocionales, psicológicas y sociales severas; y "más de 60.000" vecinos sufren un trastorno grave del sueño.

En los casos más graves, el ruido también puede incidir en la aparición y empeoramiento de enfermedades cardiovasculares y metabólicas.