La noche de las 'Laies' en 360º, una singular jarana solo para gigantas de Barcelona

Las fiestas de Santa Eulàlia culminan cada año con la Passejada de les Laies, una jarana solo para grandes mujeres. Literalmente. Una noche al año, con la excusa de la patrona menor de Barcelona, una veintena de gigantas de Ciutat Vella desfilan sin sus parejas por el centro de la ciudad. Dejan a los hombres en casa, en definitiva, para divertirse y socializar a su aire. Además este 2023 tenían un cumpleaños importante que celebrar.

El Periódico ha podido participar en este acto singular de la fiesta mayor de invierno y ofrece a los lectores una experiencia excepcional en 360º. Los siguientes vídeos permiten sumergirse en el baile de las Laies celebrado este domingo para poder verlo desde el interior. Una vista inédita que acerca como nunca a las protagonistas y al latido de la cultura popular.

Este paseo femenino se celebra desde 1984 y pone la guinda a la diada de la patrona cada 12 de febrero. Su nombre se debe a que las gigantas se escapan de incógnito, porque momentáneamente dejan de lado su identidad y todas se hacen llamar Laia. Los días previos sí que desfilan y posan con sus parejas masculinas, siguiendo con el canon que marcan los actos tradicionales del programa.

La cita empieza alrededor de las 19h en la plaza de Sant Josep Oriol con una merienda de las colles a base de chocolate caliente y el dulce típico de esta festividad, la aspa de Santa Eulàlia. Inician el recorrido por el barrio Gòtic cuando ya ha anochecido, con música, buen humor y una parada obligada: la Baixada de Santa Eulàlia, donde bailan ante la hornacina que resguarda una imagen de la joven mártir romana. El itinerario culmina en la plaza Sant Jaume con el Ball de Santa Eulàlia. Las lideresas de la cita son las gigantas que sí se llaman Laia todo el año: la gegantona Laia, la Eulàlia de la plaza Nova y la Laia del Pi.

La cercavila viene precedida de una semana en la que las gigantas ya se han visto a solas en el Palau de la Virreina, en la Rambla. Es la exposición de las Laies, que atrae cada año un amplio público familiar encantado de observar de cerca y sin prisas estas figuras artesanales XXL. De hecho esta sede municipal es la residencia permanente de la giganta Laia, que se puede visitar aquí todo el año.

El cumpleaños de Laia

Precisamente este 2023 las gigantas celebraban un aniversario especial: la figura principal, la Laia, cumple 25 años. De iniciativa municipal, retrata a la patrona mártir según la describe tradición local: una niña romana de 13 años sentenciada por no querer renunciar a la fe católica. El diseño no es original sino la reproducción en tres dimensiones de la protagonista de un cartel de las fiestas que tuvo mucho éxito: el que ilustró Carme Solé en 1997. Fue todo un hit, equiparable al cartel de Malika Favre para la Mercè de 2022.

Tanto en el cartel como en la figura, Laia va engalanada con una corona de flores y viste a la moda del siglo IV, época en la que habría vivido la santa según la tradición local. El vestido, por cierto, es nuevo: se renovó en 2019 y es obra de Guillem Amorós (Folk al Biaix). En una mano lleva la palma, símbolo del martirio, y en la otra aguanta una cruz en aspa en recuerdo a su condena.

La giganta la impulsaron el Ayuntamiento y la Coordinadora de Gegants i Bestiari de la Ciutat Vella. Suelen sacarla a bailar con los más jóvenes de cada colla, ya que es más ligera y pequeña que las grandes figuras. La construyó el especialista Xavier Jansana, bajo la mirada atenta de la propia Solé. Se estrenó en 1998 por la fiesta mayor de invierno y, ya de inicio, se estipuló que solo saldría en esta celebración… aunque se ha saltado esta restricción más de una vez. ¡Una Laia es una Laia!

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