Los bomberos aconsejan detectores de humo para evitar muertes en fuegos domésticos

Un bombero del Ayuntamiento de Barcelona grabó un vídeo del interior de un fuego reciente declarado en un piso del Eixample de Barcelona. En el plano secuencia que registró con su teléfono móvil se apreciaba el interior de un domicilio completamente calcinado por las llamas, hasta que abría una puerta de una de las habitaciones y la descubría intacta. 

El vídeo es quizá la mejor demostración gráfica de algo que los bomberos llevan años repitiendo: que tratar de huir por las escaleras, a través del humo, dispara el riesgo de morir intoxicado y que encerrarse en una habitación con ventana exterior, llamar al 112 y esperar a ser rescatado, en sentido contrario, multiplica las posibilidades de supervivencia. Porque al fuego le cuesta más de lo que parece penetrar una puerta cerrada y una habitación puede convertirse en un espacio seguro hasta que lleguen los bomberos. En cambio, tratar de alcanzar la calle a través de una escalera cargada de vapores tóxicos por la combustión se ha convertido en la causa frecuente de personas que han terminado asfixiadas.

Sebastià Massagué, jefe de los Bombers de Barcelona, afirma que a veces se han sentido dando voces en el desierto cuando insisten en que no hay mejor seguridad que la prevención. "Hay consejos básicos que si los ciudadanos conocieran permitirían salvar vidas", insistía un bombero a este diario recientemente. El Ayuntamiento de Barcelona ha iniciado una campaña este viernes para prevenir el riesgo de incendios en domicilios durante el invierno. 

Al ya conocido contexto de pobreza energética se le suma la crisis energética derivada de la guerra con Rusia. El gas y la luz serán más caros que en años anteriores durante los meses de frío y es posible que los ciudadanos recurran a otras vías para calentarse, disparando el riesgo de incendios.

Los bomberos consideran que, dado que los incendios más mortales acostumbran a ser nocturnos porque las personas no se percatan de su existencia hasta que puede resultar demasiado tarde, instalar un detector de humos, que avisa con señales acústicas cuando acaba de arrancar. Se trata de un aparato económico, que cuesta entre 10 y 20 euros, que no requiere de instalación y que permite saber a tiempo que acaba de declararse un incendio dentro de casa. La alarma acústica permite a la familia que duerme enterarse de que acaba de declararse un fuego.

Riesgo para familias vulnerables

El equipo de prevención de los bomberos de Barcelona, entre los que se cuenta técnicos con conocimientos de ingeniería o arquitectura, advierte de que podría incrementarse el uso de estufas catalíticas o la acumulación de radiadores eléctricos que acrecientan el riesgo de cortocircuito, sobre todo si además están conectados a un circuito pinchado ilegalmente a la red. Recuerdan que no deben sobrecargarse los enchufes porque pueden arder y también que conviene asegurarse de que los artefactos que tienen llama directa no están cerca del elementos que podrían propagar las llamas, como una cortina o un cojín.

Sobre el peligro que pueden acarrear las baterías de los patinetes eléctricos –que pueden arder si se calientan en exceso–, los bomberos recomiendan cargarlas durante el día, en el exterior y no hacerlo junto a la puerta a través de la que se saldría al exterior en caso de incendio.

Bajo el lema 'A casa, no convidis el foc' (no invites al fuego a casa), los bomberos de Barcelona han iniciado una campaña de consejos para llegar a los colectivos más vulnerables a quienes no siempre es fácil acceder. Habrá dípticos, reuniones y mensajes a través de las redes sociales. Los bomberos no descartan que familias en riesgo de exclusión social puedan incluso usar braseros o quemar madera dentro de casa para calentar un hogar a la desesperada Esto último es peligroso no solo por las llamas que pueden generar sino porque, en un ambiente no ventilado, la propia combustión puede intoxicar hasta provocar la muerte mientras se duerme.

Tres incendios en domicilios al día

En Barcelona hay una media de 1.200 incendios en domicilios anualmente. Más de tres cada día. A lo largo del presente 2022 han muerto cinco personas.

En caso de sufrir un incendio en el domicilio debe llamarse al teléfono de Emergències, el 112. Y no tratar de huir a la calle sino aislarse del fuego cerrando tantas puertas como resulte posible. "Hay ocasiones en que las personas huyen dejando la puerta de su domicilio abierta y eso llena de humo la escalera comunitaria que es por donde pueden querer salir corriendo los habitantes de plantas superiores”, recuerda un bombero. Como reflejaba el vídeo al que se aludía más arriba: confinarse en una habitación y esperar a ser rescatada es mucho más seguro.