Emergencia habitacional

La primera cooperativa de viviendas LGTBIQ+ del Estado se alza en Nou Barris

La cooperativa feminista de viviendas, La Morada, comienza a construir la primera cooperativa de viviendas integrada por "mujeres, lesbianas, trans y otras identidades disidentes"

Diseño del edificio de La Morada

Diseño del edificio de La Morada / LA MORADA

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Comienzan las obras del primer proyecto de viviendas cooperativas feminista y LGTBIQ+ del Estado español en el barrio de Roquetes de Barcelona, en el distrito de Nou Barris. Las impulsoras de esta iniciativa son La Morada, una cooperativa feminista de viviendas que luchan por el acceso a un domicilio digno, asequible y sostenible en un contexto de emergencia habitacional. La Morada está integrada por "mujeres, lesbianas, trans y otras identidades disidentes" según se definen ellas mismas. En un comunicado, explican que apuestan por organizar la vida, las curas y los afectos "más allá del modelo de la familia nuclear" tradicional.

Suelo privado

A diferencia de las múltiples promociones de vivienda cooperativa que se han presentado en Barcelona los últimos años, los pisos en cesión de uso de La Morada no se alzan sobre suelo público. La iniciativa saca pecho de destinar suelo privado a la vía cooperativa y evitar así un potencial uso especulativo del terreno. La cooperativa se edificará en un solar vacío que fue comprado en el mercado privado por La Dinamo Fundación y que después esta cedió a La Morada a través de una convocatoria abierta a 60 años prorrogables a 75. El solar acogerá 13 viviendas que se calificarán de Vivienda de Protección Oficial y que ayudarán a expandir el parque de vivienda pública de Roquetes, un barrio castigado por el incremento de precios del alquiler.

La Morada, además de la ayuda económica de sus socias, consiguió un préstamo del servicio financiero ético y solidario de Coop57 y ha sido beneficiaria de ayudas como HabitatCoop 2021 de la Generalitat de Catalunya que subvenciona una parte de los costes de promoción y que han hecho posible que el proyecto fuese más viable económicamente.

El edificio que acogerá a La Morada ha sido diseñado por la cooperativa de arquitectas Lacol de forma que se pueda adaptar a las necesidades de la cooperativa y de las unidades de convivencia a lo largo del tiempo.