Transporte público

La gratuidad de Rodalies no logra reducir el tráfico en el entorno de Barcelona

La circulación apenas ha caído 0,4 puntos en el área metropolitana e incluso ha aumentado 0,8 puntos en el perímetro inmediato de la ciudad

Ronda de Dalt Barcelona

Ronda de Dalt Barcelona / EPC

Carlos Márquez Daniel

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Las encuestas que se realizan a los usuarios del transporte público no muestran un especial enojo sobre el precio del metro, el bus o el tren. Hay malestar por la impuntualidad, las averías, la falta de frecuencia, la ausencia de corredores hacia determinadas zonas o incluso el frío dentro de los vagones. Pero del precio, ni una palabra. A pesar de ello, el Gobierno decidió bonificar los desplazamientos colectivos, hasta el punto de ofrecer la gratuidad de Rodalies a los viajeros habituales. Sucedió el 1 de septiembre y la lógica invitaba a pensar que se produciría un cierto tránsito ciudadano hacia estos modos de transporte. Pues no. Según ha detallado el director del Servei Català de Trànsit, Ramon Lamiel, el tráfico solo ha bajado 0,4 puntos porcentuales en el área metropolitana, mientras que en los accesos a Barcelona incluso ha aumentado 0,8 puntos.

Trànsit ha analizado dos periodos: del 1 de enero hasta el 31 de agosto, y del 1 de septiembre hasta hoy. Todo, cogiendo como base las mismas fechas de 2019, año 1 antes de la pandemia. Se han analizado cinco corredores (Garraf, Llobregat, Maresme, Vallès Occidental y Vallès Oriental), con dos mediciones en cada uno: en el acceso a la capital catalana y a una distancia de 10 kilómetros. Todo ello hace referencia a días laborables, puesto que en vigilias de festivo y festivos se han producido incrementos de tráfico a pesar de las rebajas en el transporte público.

Cifras de viajeros

Según los datos de Trànsit, todos los puntos del anillo 0 (los que tocan a Barcelona) presentan incrementos, mientras que los del anillo 1 (a 10 kilómetros), los corredores del Garraf (-0,7%) y el del Llobregat (-2%) son los únicos que caen respecto al valor de referencia. La A2 y la B23, ambas del pasillo del Llobregat, son las que presentan caídas más significativas. Puede que siga pesando mucho el fin de los peajes en autopistas como la AP-7, la C-33, la AP-2 o la C-32. En la autopista del Mediterráneo, en un año sin barreras, el incremento de la circulación de turismos fue de cerca del 40%, mientras que los vehículos pesados se dispararon el 80%.

Este dato se complementa con la cifra de viajeros de Rodalies, un registro que apenas se ha movido a pesar de la gratuidad. Según Renfe, el ferrocarril en Catalunya sigue un 15% por debajo de lo habitual antes de la pandemia, mientras que en el interior de Barcelona, Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) asegura que el metro ya está casi en los mismos valores que en 2019, mientras que el bus todavía está casi un 10% por debajo. El tranvía, en cambio, según datos de la Autoritat Metropolitana del Transport (ATM), está incluso por encima de los números previos al covid.