La suciedad se dispara como preocupación ciudadana en Barcelona

Un estudio más del Ayuntamiento de Barcelona reafirma que la impresión entre los barceloneses de que la capital catalana padece de delincuencia y de falta de limpieza no solo se mantiene, sino que además crece. La encuesta de servicios municipales en que el Ayuntamiento de Barcelona sondeó a 6.000 personas entre el 17 de febrero y el 16 de mayo reafirma que los vecinos perciben la inseguridad como el principal hándicap de la ciudad, una opinión en la que coincidían el 14,5% de los entrevistados en 2021 y que ahora expresa el 19,1%. Es el porcentaje más alto desde 2012. El crecimiento aún es más acentuado en el caso de la sensación de que Barcelona está desaseada: escala de cuarto problema con un 6,9% de menciones en 2021 a segundo inconveniente de la ciudad, señalado por un 12,4% de los encuestados, casi el doble que un año atrás y el porcentaje más alto desde 2006.

La inquietud por la limpieza pasa por delante del acceso a la vivienda -que desciende de segundo problema a tercero, según los consultados- y el paro y la condiciones de trabajo -cae en la clasificación de tercer perjuicio de la ciudad a octavo-. En cambio, repunta la preocupación por la contaminación, que se afianza como cuarto problema de la ciudad para los encuestados, y la congestión de tráfico, que figura como el quinto suplicio que más citan los barceloneses, a tenor del sondeo.

En cuanto a los problemas personales que los vecinos entrevistados reconocen, las estrecheces económicas y la precariedad laboral se permutan la primera y la segunda plaza respecto al estudio del año pasado. Las dificultades en la economía doméstica descollan como el principal quebradero de cabeza para los barceloneses. Pasan de ser referidas por un 7,2% de los entrevistados a un 13,8%. En cambio, se invierte la tendencia en el desasosiego por el paro y el trabajo, al decaer de un 15,8% de alusiones en 2021 a un 11,7% en 2022.

La tercera inquietud particular de los barceloneses vuelve a ser la inseguridad, igual que el año pasado, aunque crece algo: mientras que el 7,2% de los consultados se sentía afectado por la delincuencia el año pasado, ahora lo manifiesta el 8,8%. En la lista de dificultades le siguen el acceso a la vivienda (6%), equipamientos y servicios (4,5%) y la suciedad (4%). La inseguridad y la falta de limpieza son los que más crecen en el capítulo de molestias personales: la falta de seguridad sube un 1,6% y de limpieza, un 1,5%.

Aprobado para la gestión municipal

Por otro lado, el gobierno municipal de la alcaldesa Ada Colau obtiene un aprobado con 5,7 puntos, un resultado similar al de 2021, cuando recibió un 5,8. “Un 75% aprueba la gestión municipal. No es sencillo en el contexto actual y en medio de incertidumbre política en Cataluña y en Europa”, ha destacado el teniente de alcalde Jordi Martí, que ha añadido que la encuesta provoca una “satisfacción moderada” en el ejecutivo municipal. 

“Este ayuntamiento aguanta muy bien en una situación de incertidumbre y un contexto de crisis. Lo hace el ayuntamiento, la ciudad y el gobierno municipal”, ha concluido Martí, que ha subrayado que los barceloneses consultados aprueban a los equipos de limpieza (otorgan un 6,9 al servicio de retirada de residuos y un 6 a limpieza viaria) y de seguridad (la Guardia Urbana recibe un 6,2, la seguridad en los barrios merece un 5,9 y en la ciudad, un 5,3). No obstante, el estudio detalla que el 35,4% piensa que el aseo de las calles ha empeorado respecto al año pasado -un 30% piensa que ha mejorado- y el 39% cree que la seguridad en su barrio se ha resentido y el 53,7% piensa que se deteriorado en el conjunto de Barcelona. 

“No rehuimos que se necesitan mejoras”, ha concedido Martí, que ha recalcado que el descenso en la evaluación a limpieza y seguridad es “de unas décimas”. A su vez, ha rogado evitar el catastrofismo. "De cada 100 personas, 14 o 15 han expresado estos problemas", ha subrayado el teniente de alcalde. En todo caso, ha añadido que el gobierno municipal recoge el guante. “Lo entendemos como un reto para seguir mejorando en esos ámbitos”, ha señalado. Como es habitual, la peor nota es para el aparcamiento. Es el único servicio que recibe un suspenso, al que lleva abonado desde hace años: los barceloneses lo desaprueban con un cuatro.

La oposición ve desgaste

Por su parte, la oposición ve en los resultados del estudio una prueba del desgaste del bipartito de 'comuns' y de PSC. El concejal Jordi Martí Galbis (Junts) ha reprochado que los datos se hayan presentado "tras seis horas" de pleno municipal, celebrado este viernes. 

"El gobierno ha visto que es una mala encuesta, con unos resultados malos o muy malos, y quieren que pase desapercibida", ha criticado el posconvergente, que ha resaltado que "más del 50% de los barceloneses afirman que la evolución de la ciudad es negativa". Ya con perspectiva electoral por las municipales del próximo mayo, Martí Galbis ha confiado que los datos que ha espigado sean el preludio de "un cambio en la ciudad". 

Por su parte, Elisenda Alamany (ERC) ha recalcado que "hay problemas que se enquistan, como la seguridad y la limpieza". La republicana ha denunciado que "siguen sin respuesta por parte del gobierno".