Nueva atracción

El parque de atracciones del Tibidabo contará con una caída libre en 2024

La instalación tendrá 50 metros de altura, capacidad para 24 personas por turno y permitirá el acceso a partir de 1,25 metros de estatura

BARCELONA22/06/2022 Zona del Tibidabo on estarà la nova atracció de caiguda lliure el 2024   FOTO: ALVARO MONGE

BARCELONA22/06/2022 Zona del Tibidabo on estarà la nova atracció de caiguda lliure el 2024 FOTO: ALVARO MONGE / ALVARO MONGE

Toni Sust

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Barcelona entrará en 2024 desafiando a un nuevo vértigo. Los entusiastas del parque de atracciones del Tibidabo tendrán un nuevo aliciente para subir a la montaña dentro de año y medio. El parque contará con un nuevo tipo de atracción que promete convertirse en uno de sus atractivos principales: si se cumple el calendario, la instalación contará con una caída libre en enero de 2024. Si todo va muy bien, incluso a finales de 2023.

La nueva atracción será fabricada por la empresa Funtime Handels GmbH y estará ubicada donde antes se encontraba el 'Hurakán'. La caída libre del Tibidabo tendrá una altura de 50 metros y una capacidad para 24 personas por turno. La góndola que los transportará podrá hacer giros de 360º durante el recorrido. La torre principal contará con iluminación LED.

Menos altura

Para comparar con la más cercana, que está a 92 kilómetros de la capital catalana, en Vilaseca, la caída libre de Port Aventura, el Hurakan Cóndor,  tiene una altura de algo más de 100 metros y permite la entrada a personas de más de 140 centímetros y 195 como máximo de altura. Quien lo haya probado conocerá aquella sensación de quién me ha mandado meterme en este lío al subir lentamente hacia la cima y el acojone entre gritos en el descenso.

Tibidabo

Tibidabo / El Periódico

La caída libre de Barcelona tendrá una peculiaridad en cuanto al acceso que las familias agradecerán. Porque seguro que son muchas las que han experimentado la lenta espera que en ocasiones se requiere para que una criatura llegue a la estatura necesaria para disfrutar de algunas instalaciones.

Es frecuente que crezca más lentamente la criatura que su interés por experimentar la velocidad y el vértigo. Y a veces se intenta forzar cuando casi se ha llegado al límite inferior mínimo, con unos zapatos de suela gruesa o un calcetín doble que permita alcanzar los deseados 140 centímetros. En Barcelona, gracias al diseño de los arneses de seguridad y los asientos, bastará con 125 centímetros de altura para poder acceder a la caída libre, lo que ampliará el público potencial, El límite máximo para poder acceder será de 195 centímetros.

Sistema de frenado

Una de las características principales de la atracción será el sistema de frenado. Un sistema de frenado magnético de última generación. El diseño, la fabricación, la instalación y la puesta en marcha de la atracción se harán bajo la certificación EN13814:2019. La potencia eléctrica necesaria será de cerca de 300 kW, de las más bajas en instalaciones similares.

El jefe de mantenimiento del parque de atracciones, Joan Manel Esquius, afirma que la nueva será la atracción “más emocionante” junto con la montaña rusa. “Experimentarás la fuerza de la gravedad de forma real”. Relata Esquius que pese a contar con la mitad de altura que la caída libre de Port Aventura, en el caso del Tibidabo el efecto será muy intenso: “Aquí no hace falta que sea tan alta porque al estar en la cima de una montaña las vistas serán muy espectaculares. Tanto de Barcelona como del Baix Llobregat y el Vallès”.

La imagen de la entrada inferior del parque, donde estará la nueva atracción, se verá modificada, cuenta el jefe de matenimiento

Hay dos tipos de caídas libres, prosigue Esquius. Una, mediante una góndola que se engancha a un cable que la eleva y que una vez arriba, separada del cable, cae. Es el caso del que habrá en el Tibidabo. Contará con el frenado magnético para detenerse. Magnético, “por seguridad, porque está siempre imantado”. Es decir, no funciona con un electroimán, al que se le da y se le quita la electricidad. Que no haya cable, subraya, intensifica la caída libre. El otro sistema es el que funciona con cable tanto en la subida como en la bajada: “Como un ascensor muy rápido”.

Dos giros de 360º

Queda mucho por hacer: “Hay que rehacer la tematización del espacio. Cómo lo pintaremos, como cambiará la imagen de la entrada inferior del parque, que se verá modificada. Abriremos un concurso de ideas”, cuenta Esquius. Lo que sí parece claro ya, aunque la concreción definitiva esté por llegar, es que la góndola hará dos giros de 360º grados, uno a media subida y uno cuando haya llegado a la cima.

En cuanto a la atracción que muere para que nazca la nueva, el 'Hurakán', se empezó a retirar en diciembre. A finales de febrero, la plaza que acogerá la caída libre estaba ya preparada. Se decidió cerrar el 'Hurakán' antes de la pandemia, porque, con tres décadas de labor a sus espaldas, la atracción tenía un coste de mantenimiento muy elevado: la inversión que requería afrontar sus reparaciones no tenía sentido para el tiempo en el que podía funcionar sin precisar de un nuevo remiendo. El material del 'Hurakán', acero en su mayoría, fue enviado a reciclaje. El muerto al hoyo y el vivo a la caída libre

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