Barcelona aprueba la multiconsulta para el próximo mandato

Habrá multiconsulta en Barcelona, aunque en el próximo mandato. El pleno del ayuntamiento ha aprobado este viernes con 19 votos a favor, 8 en contra y 14 abstenciones llevar a cabo las dos primeras consultas presentadas: el cambio de nombre de la plaza de Antonio López y la municipalización de la gestión del agua en la ciudad.

Después de un año de la aprobación del reglamento de participación ciudadana, que permite a los ciudadanos presentar iniciativas para llevarlas a una consulta, la medida ha salido adelante. Barcelona en Comú, ERC y la CUP, además del concejal no adscrito Juanjo Puigcorbé, han respaldado la iniciativa, que había naufragado en el pleno de abril.

La alcaldesa, Ada Colau, ha celebrado que haya llegado la aprobación aunque sea tarde. Y ha añadido: "Es cierto que ha sufrido un retraso por culpa de una multinacional arrogante que se pensaba que pagando millones de euros ganaría, pero no, hoy ha ganado Barcelona”. El mensaje era para Agbar, a la que acusa de presionar para que no se celebrara la consulta. Un discurso al que se ha sumado la concejala Gala Pin: "Está en juego la soberanía municipal".

Críticas de la oposición

El PDECat han calificado la gestión de Colau como fracaso también en este ámbito. Los exconvergentes, que se han abstenido en la votación, han recordado a la alcaldesa que impulsó las consultas sin estar aprobadas, añadiendo que han jugado con los sentimientos de los ciudadanos.

Ciutadans ha hablado de despilfarro, alegando que gastarse un millón de euros para decidir sobre un servicio público y el cambio de nombre de una plaza es malgastar el dinero de mala manera.

El PP: "una chapuza"

Por su parte el PP ha sido rotundo en su decisión "Consultas sí, pero no así. Ustedes han convertido su obligación política en una chapuza".

Tanto ERC como la CUP han votado a favor, aunque han criticado la gestión del gobierno municipal. Por su parte, el PSC se ha abstenido acusando al gobierno del ayuntamiento de no tener agallas de cumplir con sus obligaciones. “¿Por qué se esconde detrás de una consulta señora Colau? ¿No tiene voluntad política, coraje o es que tiene miedo?”, han afirmado los socialistas, que han calificado la medida de “parche”.

El reglamento

El reglamento de participación ciudadana acepta que los ciudadanos puedan presentar iniciativas y propuestas para llevar a cabo una consulta de participación. En este sentido la propuesta tiene que estar apoyada por un mínimo de firmas para poder presentarse a pleno.

Por lo que respecta a las votaciones, el reglamento de participación ciudadana dice que los partidos políticos no pueden votar en contra en el pleno, a no ser que la pregunta propuesta vaya en contra el ordenamiento jurídico. También delimita el calendario, al determinar que se celebre una consulta anual, excepto en los seis meses antes de las elecciones municipales.

Acogiéndose al reglamento, las dos primeras consultas aceptadas en el pleno se llevaran a cabo en el siguiente mandato sea cual sea el gobierno de la ciudad. Si no fuera así, la ciudadanía podría presentar recurso por la vía contencioso-administrativa.