Lo que ya recoge el plan

El plan incorpora la prohibición de nuevas actividades de restauración en la zona saturada -zona que los vecinos proponen ampliar- y limita el número máximo de licencias en la zona de contención. Limitación que no incluye las tiendas de comida preparada, que sí se regulan, como novedad.

Propuestas ya aceptadas

El Ayuntamiento de Barcelona acordó hace pocos días la suspensión de licencias para hoteles en la zona de la Vila de Gràcia durante al menos el próximo año, periodo en el que prevé reformular la regulación al respecto. Trámite que se hizo oficial en la comisión extraordinaria de Hábitat Urbano que los grupos municipales de PSC e ICV-EUiA forzaron precisamente para cuestionar decisiones adoptadas en esta materia mientras la ciudadanía aún debatía el futuro plan de usos de Gràcia a través de un complejo proceso participativo.

El gobierno municipal replica que los proyectos que han generado controversia «ya estaban aprobados» antes de que se impulsara esta iniciativa popular y que la moratoria hotelera se debe precisamente a la petición vecinal. La concejala Maite Fandos, a ojos de la cual no existe saturación hotelera en el distrito, subrayó que es el tercero por la cola en la ciudad en número de hoteles.

La polémica de las terrazas

Otro asunto pendiente es el de las terrazas, una de las grandes preocupaciones del vecindario. Estas no están recogidas en el actual plan de usos propuesto por el consistorio, y fuentes del distrito insisten en que es difícil que puedan acaban incluyéndolas, ya que ya existe una norma marco de ciudad que regular esa materia.