Homenaje póstumo

Pepe Rubianes dará nombre a una de las nuevas plazas del Paral·lel

Mural en homenaje a Pepe Rubianes en la plaza de las Tres Xemeneies.

Mural en homenaje a Pepe Rubianes en la plaza de las Tres Xemeneies.

CARLOS MÁRQUEZ DANIEL / Barcelona

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Será en la avenida de los teatros, en el Paral·lel, donde Barcelona recordará para siempre la figura de Pepe Rubianes. La reforma que el ayuntamiento tiene previsto emprender en la avenida entre abril y mayo generará cuatro nuevas plazas. Una de ellas llevará el nombre del actor, fallecido el 1 de marzo del 2009, según confirmó a este diario el propio alcalde, Xavier Trias, que une su voz a cuantos han reclamado que la ciudad recuerde al actor galaico-catalán.

Tras la muerte del cómico y el posterior clamor para dedicarle un espacio público en la ciudad, el gobierno de Jordi Hereu se anotó esa petición en la carpeta de tareas pendientes de la ponencia del nomenclátor. El entonces alcalde, de hecho, ya dio por «seguro» que Barcelona rendiría homenaje al único actor que ha sido capaz de llenar un teatro con la misma función durante casi diez años. Ahí quedó la promesa, hasta que en mayo del 2011, el consistorio pasó a manos de CiU, y más concretamente, a manos de Xavier Trias.

En el traspaso de poderes se incluyó la petición de que se estampara el nombre de Pepe Rubianes en una placa de mármol. Tenían que pasar cinco años desde su desaparición, cosa que sucederá el 1 de marzo.  «Rubianes amaba Barcelona y Barcelona sigue queriendo a Rubianes. Es justo que le devolvamos algo de lo que nos dio con tanta generosidad», apunta Trias. Mercè Homs, concejala de Ciutat Vella, ya exhibió hace dos días una ilusión y una convicción que un político solo comparte cuando sabe que el pescado está vendido. «Sería un honor que se le dedicara un espacio. Por su arraigo al territorio, creo que es una gran idea», dijo.

UNA DECISIÓN PERSONAL / Confirmado el  de CiU, la única oposición a la iniciativa llega desde el PP, pues consideran que sus polémicas declaraciones sobre España quizás merecerían darle una vuelta a la propuesta. Su opinión, como la del resto de partidos, es escuchada, pero en ningún caso resulta vinculante, puesto que la decisión final corre a cargo del alcalde de Barcelona, previa aceptación por parte de la ponencia del nomenclátor, presidida por el concejal de Cultura, Jaume Ciurana, y del pleno del distrito escogido.

Si se cumplen los plazos, la reforma de Paral·lel podría estar lista a mediados del 2015. Está previsto que las obras (ver gráfico) empiecen en abril y crearán cuatro nuevos espacios abiertos, en los cruces con Entença y Tamarit, Rocafort y Manso, Viladomat y Campo Sagrado y en la intersección con Borrell y Aldana. Es probablemente esta última la que tiene más números de convertirse en la plaza de Pepe Rubianes, según admite un portavoz municipal, por su proximidad con la zona de los teatros, a un par de suspiros del Molino. Muchos de los comentarios recibidos a través de Twitter o la página web de Change.org, donde se han recogido más de 8.000 firmas en dos días, señalaban que Rubianes era un personaje transversal, capaz de gustar a jóvenes y mayores, hombres y mujeres, gente de izquierdas o de derechas. Por eso la idea de darle una plaza, nexo de unión entre calles que en este caso, además, es un punto de unión entre Ciutat Vella, Eixample y Sants-Montjuïc, cobra todavía más sentido. «Porque con su humor y su carácter provocador era capaz de hacernos reir y reflexionar sobre todo aquello que nos rodeaba. Ahora, más que nunca, necesitamos tener presentes a personas como él», asegura Trias.

DOS ALTERNATIVAS / En la última reunión de la ponencia del nomenclátor, celebrada el 29 de enero, ya se trató el tema. El alcalde no descarta buscar una ubicación en la Barceloneta, pero eso alargaría el proceso, ya que obligaría a cambiar el nombre de un espacio ya bautizado o esperar a que surja una nuevo, y el alcalde no quiere dilatar este homenaje a un barcelonés de adopción «comprometido con el resto de la ciudadanía».