El Poblenou combate el hedor

El Ayuntamiento de Barcelona lleva cuatro meses realizando tareas de limpieza en las cloacas para combatir la pestilencia que rodea la zona marítima del Poblenou. Ayer, el concejal de Medioambiente, Joan Puigdollers, explicó que el plan prevé sanear hasta 30 kilómetros de alcantarillado, alrededor de las calles de Lope de Vega, Bac de Roda, Roc Boronat, Llacuna y Espronceda.

Hasta el momento los servicios de limpieza municipales han purificado el 67% de la superficie de los conductos del barrio, un total de 20 kilómetros, y han recogido unas 1.500 toneladas de residuos.

VERTIDOS INCÍVICOS / El 70% de los restos eliminados son de arena acumulada, y el 30% restante corresponde a vertidos incívicos de lodo y hormigón, según explicó el regidor. Se prevé que la actividad finalice en mayo, cuando se alcancen los 30 kilómetros de cloacas, 26 de red local y cuatro kilómetros más de grandes colectores. Aún así, los resultados no serán visibles hasta el verano.

«Con este plan de choque pretendemos minimizar el mal olor del barrio, una zona bastante conflictiva al encontrase por debajo de la línea del mar», argumentó Puigdollers.

Aun quedan 300 toneladas de hormigón y 1.200 toneladas de arena por limpiar pero es imposible acelerar el proceso porque, según Cristina Vila, directora de servicios del Ciclo del Agua, «el trabajo es bastante manual. Se trabaja con martillos y constantemente se sacan los restos con camiones».

El coste total rondará los 600.000 euros y tiene sus orígenes en el 2011, cuando el ayuntamiento recogió las quejas vecinales. La acción también contempla la remodelación de los imbornales del mercado del Poblenou y la renovación de las cloacas de la calle de Venero.