IMPACTO DE LA CONSTRUCCIÓN DE UNA ESTACIÓN DE RODALIES

Renfe pierde el 15% de usuarios por la restricción en Sant Andreu

El corte de tres líneas por las obras de Sagrera-Meridiana acaba en septiembre

R. C.
BARCELONA

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El corte por obras más importante de la red de Rodalies, con tres líneas interrumpidas entre Sant Andreu Arenal y Arc de Triomf durante cinco meses y medio, está teniendo una incidencia notable en el número de viajeros de las líneas afectadas, la R-3, R-4 y R-7 y las de media distancia. Desde que el pasado 28 de marzo empezó esta restricción por la construcción de la nueva estación de la red bajo la Meridiana, en el gran intercambiador de La Sagrera, el pasaje se ha reducido el 15% según reveló ayer Manel Nadal, secretario para la Mobilitat de la Generalitat, administración que gestiona Rodalies desde el traspaso del servicio el pasado enero.

La Conselleria d'Obres Públiques prevé realizar una campaña informativa para recuperar a estos viajeros una vez que el 12 de septiembre se restablezca el servicio como está previsto. Hasta entonces, las 57.000 personas que utilizaban este tramo de túnel antes del inicio de las obras deben continuar viaje o bien por la L-1 del metro o con el autobús lanzadera que funciona entre Sant Andreu Arenal y El Clot-Aragó o, en último caso, cogiendo en origen otra línea de Rodalies o de Ferrocarrils si vienen de las ciudades del Vallès por donde pasa la R-4.

Mirando el lado lleno de la botella, Manel Nadal afirmó que, en cualquier caso, este 15% de pasajeros perdidos por las molestias del transbordo o por la prolongación del tiempo del viaje que ocasiona el corte han pasado a utilizar otros sistemas de transporte público y citó el metro y el autobús.

FINALIZACIÓN EN EL 2011 / Las obras de la nueva estación de Rodalies bajo la Meridiana se iniciaron el pasado año y su finalización se prevé para principios del 2011. Una parte de la estructura de la estación se realizó cuando se construyeron los nuevos vestíbulos de las líneas L-1 y L-5 del metro que discurren en paralelo con la de Renfe. Ahora se completan los andenes y se está demoliendo una parte del túnel (por ello se ha tenido que interrumpir el tráfico ferroviario) para rebajar el nivel de la galería y eliminar su interferencia sobre las instalaciones del metro. El gestor de infraestructuras Adif invierte en estas obras 34,3 millones.

El intercambiador de La Sagrera será el más importante del norte de Barcelona con 110.000 pasajeros al día, según destacó ayer la nueva concejala de Urbanismo y también edila del distrito de Sant Andreu, Gemma Mumbrú. Además de las citadas líneas de metro y Rodalies, llegan también hasta aquí las nuevas L-9 y L-10 del suburbano. En el futuro lo hará igualmente la L-4.