Laporta da "un aprobado justito" a la temporada del Barça

Dos días después de terminar la Liga, Joan Laporta hace una balance de la temporada del equipo de Xavi Hernández. Un simple "aprobado" da el presidente al rendimiento del equipo azulgrana en su segunda campaña al frente de la presidencia. "Un aprobado justito" precisó el dirigente en una entrevista concedida a Catalunya Ràdio, "teniendo en cuenta de dónde veníamos y el lugar en el que estamos". Laporta ha visto síntomas de recuperación, pero aún insuficientes para sus expectativas. "Queremos más, estamos acostumbrados en el Barça a luchar por la Liga y no hemos podido optar por la Liga", explicó.

Laporta ha visto una diferencia entre la temporada anterior y la actual. Una ha sido que se ha elevado "el nivel de juego" con Xavi al frente del equipo. La percepción de la etapa de Koeman, en cambio, era que "el año pasado debíamos haber ganado la Liga, porque la teníamos cerca, en la mano, y la perdimos nosotros al caer con el Granada", expuso a modo de ejemplo. En esta campaña, el presidente vio la posibilidad de luchar por el título, pese a que la distancia respecto al Real Madrid era mucho mayor. Si se frustró el sueño del presidente, que se niega a "rebajar la ambición", fue "por algunas lesiones de jugadores importantes". Aludía, sin citarlo, por ejemplo, a Pedri y Ansu Fati. Luego nombró también a Gerard Piqué. Contemplaba, por otro lado, el hundimiento del Madrid que no se produjo.

El Barça, sin embargo, es más que el equipo de fútbol. Esta semana, sin ir más lejos, Laporta puede exhibir el "orgullo" de ser presidente del Barça. La sección de basket disputa la final four de la Euroliga a partir del jueves y el fútbol femenino disputa la final de la Champions el sábado. A la misma hora que si el equipo de baloncesto se clasifica. "Tomaré la decisión después de la semifinal con el Madrid, según cómo vea la situación. Elegiré en función de lo que más convenga", apuntaba el presidente azulgrana sin querer decidir sobre ese gran dilema, asumiendo que su elección, sea una u otra, será criticada. "Me tiene nervioso esto", confesó.

Sanear la economía

Mientras tanto, el cuerpo técnico y ejecutivo va preparando la futura reconstrucción de la plantilla barcelonista. Difícilmente, Laporta podrá atender todas las necesidades expresadas por Xavi. "La prioridad es aún sanear la economía", avanzaba el presidente. "La situación económica que heredamos no se arregla en un año, y si tuviéramos la habilidad de arreglarla en una temporada sería extraordinario", decía. A la deuda acumulada se une la presión del límite salarial de las nóminas de la plantilla, una asfixia "que durará hasta la temporada que viene".

Los dos problemas pueden solucionarse de golpe. "La operación con CVC (la venta del 10% de los derechos televisivos, como han hecho casi todos los clubs profesionales) nos garantiza el fair play tal y como está concebida, porque el patrimonio neto pasaría a ser positivo y podríamos afrontar las operaciones que contemplamos", comentó Laporta, aludiendo a los fichajes. No quiso entrar en pormenores ni nombres, entendiendo que el mercado, en realidad, aún no ha comenzado.

"Dembélé quiere quedarse, pero está muy tentado por otras opciones que ofrecen unas condiciones que son mejores que las que ofrecimos nosotros”

— Joan Laporta / Presidente del Barça

"Dembélé quiere quedarse"

Sí habló de uno de los casos más candentes y duraderos, como es la continuidad de Ousmane Dembélé. Las negociaciones, dilatadas a lo largo de meses, no han fructificado a menos de un mes para que concluya su contrato. La oferta sigue sobre la mesa. No ha cambiado ni habrá otra. "Él quiere quedarse, pero está muy tentado por otras opciones que ofrecen unas condiciones que son mejores que las que ofrecimos nosotros”, aseguraba. "A mí me gusta mucho Dembélé y al entrenador también le gusta". Sus agentes, en cambio, son los reticentes a que el extremo francés continúe.

Laporta había almorzado con el presidente del Valencia en un restaurante cercano con los nombres, presumiblemente, de José Luis Gayá (lateral izquierdo) y Carlos Soler (centrocampista), los dos capitanes, sobre la mesa. Dos hipotéticos refuerzos. Se escudó en la confidencialidad. Tampoco desveló los nombres de los futbolistas transferibles de la plantilla.

"Sería avanzarme al trabajo que hace la secretaría técnica y tiene su complejidad", alegó Laporta, consciente de que esa remodelación va condicionada a la capacidad económica que pueda adquirir el Barça si activa "las dos palancas" que pueden reconstruir el músculo financiero azulgrana: la venta del 10% de los derechos de televisión y el 49% de Barça Studios y BLM (sociedad que gestiona el merchandising dl club.