Agüero: "No cogí la 10 de Leo por respeto a él, es un código de amistad"

"Para mí también fue un shock lo de Leo. Me ofrecieron llevar la camiseta del 10 y mis compañeros me vacilaban: ‘Usa la 10, usa la 10! No se trata de que yo quisiera o no quisiera llevarla. Es que yo vine acá pensando: ‘Voy a jugar con Leo y la 10 la va a usar Leo’. Cuando pasó lo que pasó, yo no iba a tocar esa camiseta. No iba ni a tocarla. Más que nada porque soy muy amigo de Leo. Si le hubieran preguntado a él, capaz es de haber dicho que le habría encantado de que yo usara la 10. Fue más que nada una cuestión de respeto hacia él. La 10 no la toco por más amigos que seamos, es tuya. Si la quiere usar otro, perfecto, ningún problema. ¡Pero es tuya! ¡No es mía!

Y lo mismo le pasó a él justamente en el París. Por lo que sé, Neymar le ofreció la 10 y Leo dijo que no. Es más un código de amistad. Esa es la verdadera frase. Es más un código de amistad que cualquier otra cosa. Él no habría tenido, obviamente, problemas, eso está claro. Pero era darle ese respeto de un amigo y de decirle: ‘¡Es tuya!’

"Yo usé la 10 en Independiente, en el Atlético, en el City… La 10 del Barça es algo lindo, claro. Pero justamente la 10 es la de él. Y ese es mi código. El otro día fui a la cancha y y todo el mundo que la lleva pone el 10 de Messi"

Ya elegí el número antes. Venía con el 19, ese me gustaba. Cuando se fue Leo, no pensé en el 10. Pensé en el 19. Me lo ofrecieron todos. Yo usé la 10 en Independiente, la 10 en el Atlético, la 10 en el City… Y, obviamente, es la 10 del Barça, algo lindo, claro. Pero era justamente la de él. Y ese es mi código: ‘No, es de él. No, no la quiero usar. Para mí, el 10 sos vos, no yo’ ¿Me explico? El 10 es él. El otro día fui a la cancha y vi la camiseta del 10 en todo el estadio y todo el mundo que la lleva pone el 10 de Messi.  Esa fue mi idea, siendo amigos como somos. No fue por otra cosa.

Ahora soy el único argentino en el Barça. Intentaré siempre dejar a Argentina bien parada. Y, sobre todo, no solo a mí país. Trabajé para el Atlético para hacer las cosas bien. Si le iban bien al club me iban bien a mí. Que el club esté contento con mi actuación. Ahora estoy en el Barça. Mi mentalidad es hacer las cosas bien y que el club diga: ‘Ha cumplido los años que estuvo acá’. Yo quiero poder decir dentro de unos años: ‘Hice esto en el Barça. Marqué esos goles. ¡Mira los títulos que ganamos! El Barça es un club distinto.

Sé que el 10 del Barcelona también fue Maradona. Es el abuelo de mi hijo. Por ser Diego y lo que representó para Argentina fue algo muy triste. Cuando le pregunté a la madre si era verdad, porque no me lo creía y ella me escribe ‘sí, es verdad’, intenté llamar a mi hijo a ver qué estaba haciendo. Le llamaba, pero no me atendía. Le había dejado en casa con un amigo y la chica con la que estaba estudiando.

Luego, me atendió y le pregunté: ‘¿Cómo estás?’ Estaba más preocupado de poder ayudar a mi hijo desde lejos. Siempre se acordaba de ‘babu’, como le decía él, se divertía mucho jugando con él. Ese día, además, jugaba la Champions con el City. Llego al estadio y ahí ya recibí un mensaje de mi hijo. Se puso triste y mal. Son momentos de doble tristeza y preocupación, por Diego y por mi hijo. Encima, era un partido de fútbol, jugaba el equipo y no podía transmitir ninguna duda en el vestuario. Fue bastante duro, sobre todo por la situación que estaba pasando mi hijo".

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