El Barça se cruza en la Champions con un Nápoles en crisis

En un sorteo que deparó suerte dispar (muy dispar, de hecho) para los equipos españoles, el FC Barcelona quedó emparejado con el Nápoles en los octavos de final de la Liga de Campeones. Un rival asequible inmerso además en una profunda crisis deportiva que ha propiciado un sonado relevo en el banquillo, donde Gennaro Gattuso ha sustituido a Carlo Ancellotti. Del resto de los conjuntos de LaLiga, los madrileños fueron los más castigados por la fortuna: el Real Madrid se medirá al Manchester City de Pep Guardiola y el Atlético se las verá con el gran coco de la competición, el Liverpool, actual campeón. El Valencia, por su parte, se cruzará con el Atalanta de Bérgamo, que participa por primera vez en su historia en la Liga de Campeones.

 El Barça disputará el primer encuentro de la eliminatoria el 25 de febrero, en San Paolo, el estadio en el que Maradona pasó de ser un enorme futbolista a convertirse en un semidiós. La vuelta tendrá lugar el 18 de marzo en el Camp Nou. Pese a contar con jugadores destacados como Fabián, Mertens, Insigne y el griego Manolas, de infausto recuerdo, el Nápoles atraviesa un momento especialmente funesto en la Serie A, donde se halla a 20 puntos de la cabeza. Aun así, Gattuso se mostró optimista y desafiante: “Afrontaremos al Barcelona sin miedo”.

Con un semblante incapaz de ocultar su satisfacción, el responsable de relaciones institucionales del club azulgrana, Guillermo Amor, trató de destacar las cualidades del oponente, como manda el manual. “Todos los rivales son complicados. Decir lo contrario sería faltarles el respeto –señaló desde Nyon, donde tuvo lugar el sorteo-. El Nápoles es un equipo al que hay que respetar, con una afición que calienta mucho los partidos”. Y, aludiendo al momento convulso que atraviesa el club italiano, agregó: “Si los pilláramos ahora, con el cambio de entrenador, quizá sí podrían notar alguna dificultad, pero hasta febrero tendrán tiempo de adaptarse a las ideas del nuevo técnico”.  

Resignación del Madrid y el City

Menos felices se veía a los representantes del Real Madrid y el Manchester City enviados a la ceremonia. Txiki Begiristain, director de Fútbol del club mancuniano, admitió que hubiera preferido tener al equipo blanco como rival más adelante. “Y si no lo tenemos, tampoco pasa nada”, añadió. El exbarcelonista apuntó que, en cualquier caso, el City está “preparado” para afrontar este “enorme” compromiso y subrayó el aliciente que supondrá ver de nuevo a Pep Guardiola en el banquillo visitante del Santiago Bernabeu: “Un duelo entre el mejor entrenador del mundo y el Real Madrid siempre es interesante”.

Emilio Butragueño, director de relaciones institucionales del Madrid, calificó de “apasionante” la eliminatoria (“estos partidos son los que hacen crecer este maravilloso deporte”, apuntó) y recordó que el Manchester City “ha invertido mucho dinero en los últimos años”, pero se mostró confiado en que su equipo será capaz de obtener el pase a cuartos: “Somos el Real Madrid”.