La temporada azulgrana

De Pinto a Valdés

Seguridad 8 Arriba, Valdés despeja el tiro de Sinama; Abajo, Pinto se lanza ante Jordi Alba, en Mestalla.

Seguridad 8 Arriba, Valdés despeja el tiro de Sinama; Abajo, Pinto se lanza ante Jordi Alba, en Mestalla.

JORDI TIÓ
BARCELONA

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Las alarmas se dispararon en el Camp Nou a la mañana siguiente de caer por 2-1 en el Emirates de Londres ante el Arsenal en la ida de los octavos de la Champions. Valdés sufría una lesión en la rodilla izquierda (distensión en la cápsula posterior) y se perdería varios partidos. Justo cuando el calendario se empinaba de lo lindo por su dificultad: llegaba el Athletic al Camp Nou mientras que el Mallorca y el Valencia aguardaban fuera. Mal momento para perder a Valdés.

Pero la ausencia del guardián titular de la portería azulgrana ha servido para engrandecer aun más la figura del mejor suplente que, hoy por hoy, puede tener Valdés, a entender de los técnicos. Con Pinto, reservado por Guardiola para los partidos de Copa y los duelos intrascendentes de Liga y Champions, el Barça sumó nueve puntos en la Liga y tan solo encajó un gol: el que transformó de penalti Iraola para el Athletic en el Camp Nou. Tres de tres, nueve puntos, seis goles a favor y tan solo uno en contra. Es difícil hacerlo mejor.

Renovación ganada a pulso

El meta gaditano, que como él mismo avanzó ya ha recibido la llamada del club para renovar por otra temporada -«vine para seis meses y ya llevaré cuatro años», suele recordar orgulloso- se ha reivindicado de nuevo en tres duelos exigentes. Si alguien dudaba de su aportación, ahí están sus estadísticas. Si alguien fruncía el ceño por su presencia en el equipo titular y se mostraba inquieto por su segura alineación en la final de Copa ante el Madrid -«jugarán Pinto y 10 más», avanzó Guardiola-, ya tiene nuevos motivos para estar tranquilo. Como lo está Guardiola cuando tiene a Pinto bajo los palos, como lo está el equipo. No es Valdés, desde luego, pero es el mejor clon que puede tener. Por lo que ofrece en el campo y fuera de él, convertido en uno de los aglutinadores del grupo y en un inseparable de Messi.

Distintos pero muy iguales

Pinto no es Valdés, cierto, pero su rendimiento está a la altura del portero de L'Hospitalet. Estéticamente no se parecen en nada (uno luce un pelo espectacular rematado con una cuidada cola mientras que el otro suele ir rapado como una bola de billar) y su forma de moverse bajo los palos también es opuesta: uno no para de silbar, de chillar, gesticular mientras que el otro es mucho más sobrio en sus movimientos. Sí, son distintos aunque sus números les hacen muy próximos el uno del otro.

En los últimos 11 partidos (8 de Liga, 2 de Copa y 1 de la Champions), Pinto ha sido titular en cinco ocasiones, encajando tan solo un gol de penalti. Valdés ha disputado los seis duelos restantes, en los que ha visto perforada la portería en dos ocasiones (Sporting y Arsenal). Once partidos, dos porteros y tres tantos encajados: nueve triunfos, un empate y una sola derrota. Son los números de Valdés y Pinto, los guardianes del Barça.