El Barça de Grimau se estrena con un sólido triunfo en el derbi ante el Joventut

Roger Grimau guardará un gran recuerdo de su estreno en el banquillo del Barça. Suponía todo un desafío para su debut en la élite, tanto por las malas sensaciones que había dejado el equipo en la Supercopa frente al Madrid, como por la exigencia, un derbi frente al Joventut en el Palau. Pero el equipo azulgrana superó con solvencia la prueba, se impuso con claridad al conjunto verdinegro (95-79) y el técnico pudo sonreír al final.

“Nunca es fácil el debut, en casa, el derbi. Pero algo mejor defensivamente en la segunda parte y contento”, admitió el técnico barcelonés. "El Barça ha jugado mucho mejor, con gran acierto desde la línea de triple, que hemos defendido muy mal. Nos han metido muchos puntos y tenemos que hacerlo mucho mejor", reconoció el preparador verdinegro Carles Duran.

El Barça empezó tímido pero acabó con un gran acierto desde el triple (15 anotados) y buenas sensaciones colectivas sobre todo porque logró sumar en el tramo final a Willy Hernangómez y Jabari Parker, dos jugadores que deben ser claves en los esquemas, pero que han dejado dudas en la pretemporada por su falta de acoplamiento. Parker acabó con 13 puntos, como máximo anotador, en 11 minutos (3 de 4 en triples) y Hernangómez, con 10 puntos y 6 rebotes en 17 minutos. En la Penya destacaron dos de las nuevas incorporaciones, tanto el escolta Andrew Andrews (15 puntos) como el pívot Chinanu Onuaku (12 puntos, 3 rebotes).

Equilibrio de inicio

Consiguió llevar la iniciativa el Barça, pero sin lograr imponer su guion. El Joventut fue capaz de darle réplica en todo momento, discutirle la pelea por el rebote, y también el dominio interior con el protagonismo de Tomic y el debutante Onuaku, un exNBA que, por lo visto en el Palau, dará mucho a los verdinegros.

El Barça desplegó, por momentos, ese juego rápido que intenta darle Grimau como sello esta temporada. Cuando controló el rebote y pudo correr, sumó con facilidad. Pero le costó más elaborar y sobre todo generar acciones para sus pívots.

Ni Vesely ni Willy Hernangómez, uno de sus fichajes estrellas este verano, tuvieron peso de inicio en el juego azulgrana. El juego del madrileño no alcanza, por ahora, las expectativas que levantó su fichaje este verano. Se le ve algo desubicado, igual que a Jabari Parker, con recursos en ataque, pero con problemas en defensa. Da Silva fue el que más creó entre los interiores azulgranas, con acciones de fuera a dentro.

Sólidez en defensa

Los mejores minutos barcelonistas llegaron con el liderazgo de Satoransky y los buenos porcentajes exteriores, especialmente desde el triple, y eso propició un parcial de 13-2 en el segundo cuarto que abrió la primera ventaja clara azulgrana (34-24, m. 15). Pero el Joventut siempre encontró una solución para reequilibrar el marcador con los balones interiores a Brodziansky y a Onuaku y el verso libre que supone Andrés Feliz, lo que dejó en tablas el marcador al descanso (44-40).

Subió la intensidad el Barça en la reanudación y eso le dio réditos de inicio frente a un Joventut que le costó mucho encontrar situaciones de ventaja en ataque. Pero también jugó en su contra, porque se metió rápidamente en bonus de faltas y eso sostuvo al conjunto badalonés, que logró sumar desde la línea de personal (9 de 9 en tiros libres) para mantenerse a la sombra del equipo de Grimau, hasta que las acciones de Brizuela y Willy Hernangómez lograron abrir la primera brecha clara para los azulgranas (68-57 m. 30) que dispararon su confianza.

No bajó los brazos el Joventut, pero el Barça mantuvo su solidez en defensa. También sus altos porcentajes desde el triple (15 de 26, un 57%), con el protagonismo de Jabari Parker, que se sumó para mostrar su pegada. En esos minutos finales, el equipo azulgrana recurrió al control de Laprovittola y Satoransky para certificar su primera victoria de la temporada.