Llull, el héroe de los tiros imposibles

Pocas horas después de que la canasta ganadora de Stephen Curry ante los Thunder en la NBA se hiciera global, como todo lo que hace últimamente el genial base de los Warriors, Sergio Llull decidió superar el modelo y dejar para la memoria colectiva una de esas canastas que difícilmente se olvidan y que se ha convertido en un fenómeno en las redes con cerca de 6 millones de reproducciones en las horas posteriores al partido, la jugada más vista en la historia de la ACB.

    Fueron 20,2 metros en 2,1 segundos de vuelo los que recorrió el tiro ganador de Llull en Valencia, distancia que hace palidecer al lanzamiento de Curry a 10 metros, y que el propio base madridista, apasionado de su deporte, replicó en su cuenta personal de Twitter antes de jugar en la Fonteta.

    «Fue un poco increíble, no pensaba que entraba, y cuando entró, me quedé un poco sorprendido. Es una de esas canastas de las que entran una entre mil», admitió Sergio Llull nada más concretarse este domingo el triunfo del Madrid (94-95) en una cancha donde nadie había conseguido ganar ningún equipo esta temporada, «un churro que, por suerte, entró y ganamos», añadió con modestia el base de Mahón (15 de noviembre de 1987) que se siente cada día más cómodo en el papel de jugador decisivo que ha acabado por arrogarse en la plantilla blanca.

    No es la primera canasta decisiva de Llull, que ha recorrido un largo camino desde que Sergio Scariolo puso un balón clave en sus manos para resolver un partido del Europeo del 2009. Ese torneo, con 21 años, fue su debut en la selección y los árbitros, en su entrada a la carrera hacia canasta, con Turquía como rival, obviaron la falta y concedieron el tapón. España perdió ese encuentro, pero acabó levantando el título. Marc Gasol criticó, en primera instancia, la decisión. “Si se la juega el chico pasan estas cosas”, declaró, aunque luego se explicó y dijo que era una referencia a los árbitros y no al base de Menorca.

    Desde entonces, ha resuelto más de un partido, Lo sufrió el propio Valencia hace un año, en los 'play-offs' de semifinales, cuando decidió con un triple la victoria blanca en La Fonteta y forzó el quinto partido. O el Barça, en la final de Copa del 2014 en Las Palmas, con un triple desde la esquina en el último segundo. Pero también el Baskonia, el Fuenlabrada, el Gran Canaria…

CORTEJO DE LOS ROCKETS

El chico al que tanteó el Barça y compró su carta de libertad en el Manresa, entonces en la LEB Oro, y llegó con 19 años al Madrid para relanzar su carrera, se ha convertido en un jugador determinante, un prodigio físico, de carácter indomable, especialista en las acciones que los estadounidenses definen como ‘clutch time’, jugadas decisivas.

    Hace tiempo que los Houston Rockets, que poseen sus derechos en la NBA, lo cortejan, pero Llull aparcó el interés en verano renovando con el Madrid hasta el 2021, decidido a exprimir al máximo una de las mejores épocas (una Euroliga, 3 Ligas, 4 Copas) del baloncesto de la capital.