Urbanismo

"Victoria judicial" de Albiol en Badalona para derribar la antigua fábrica Mobba si no hay recurso de casación

El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya da la razón al Ayuntamiento y permite tirar al suelo la antigua fábrica de balanzas

Enésimo SOS para dignificar el espacio de la antigua fábrica Mobba de Badalona

El Ayuntamiento de Badalona recurre al TSJC la sentencia que impide el derribo de la Mobba

El alcalde Albiol durante la rueda de prensa sobre el futuro de la antigua fábrica Mobba de Badalona

El alcalde Albiol durante la rueda de prensa sobre el futuro de la antigua fábrica Mobba de Badalona / ACN

Gerardo Santos

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El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha aceptado el recurso que presentó el Ayuntamiento de Badalona contra la paralización del derrumbe de la antigua fábrica Mobba, dictada por un juzgado de primera instancia hace ahora dos años: "El TSJC nos ha dado la razón al gobierno municipal de Badalona, la Generalitat no puede pisar la autonomía del Ayuntamiento y nadie desde fuera nos ha de decir qué debemos hacer en los ámbitos que son competencia municipal", ha señalado el alcalde, Xavier Garcia Albiol, durante una rueda de prensa en que se ha mostrado muy contento por la decisión del TSJC, que ha calificado como una "victoria judicial a una batalla política".

Afuera del edificio de oficinas municipales del Viver, donde el Ayuntamiento ha explicado los detalles del futuro de la Mobba, diversos vecinos del entorno de la antigua fábrica esperaban a que finalizase la rueda de prensa para reunirse con el alcalde Albiol: "Los partidos de la oposición deberían pedir una disculpa pública porque hemos perdido tres años en los que la situación se ha ido deteriorando, aunque hemos llevado a cabo algunas acciones para mitigarlo". "Todo esto a quien más a perjudicado es a los vecinos más próximos a la fábrica", ha relatado Albiol, en la línea de lo que diversos vecinos han denunciado en muchas ocasiones, incluso en cartas enviadas a la sección Entre Todos de EL PERIÓIDICO.

En octubre de 2021, el juzgado contencioso administrativo número 14 de Barcelona aceptaba las medidas cautelares reclamadas por el Grupo de Trabajo sobre la Mobba y acordaba dejar en suspenso el derribo de la antigua fábrica de básculas de Badalona: "Esa plataforma tenía claros objetivos políticos, y estaba defendida por los partidos de la oposición", ha acusado Albiol.

La Mobba, situada en el barrio del Centre, y muy cerca del mar, es un espacio que el consitorio significa como "fachada de la ciudad", y no en vano es una de las imagenes más reconocibles que los viajeros ven de Badalona cuando se desplazan desde Barcelona al Maresme. La siguiente pantalla de todo este proceso sería la del derrumbe, aunque la sentencia del TSJC abre un plazo de 30 días para que las partes presenten un recurso de casación al Tribunal Supremo: "No tendría ningún tipo de recorrido, seguro", sostiene el edil popular.

Una plaza blanda y verde

"Tiraremos adelante durante este mandato nuestro compromiso electoral ante los vecinos, que es el de construir una plaza que sea de su agrado", señala el edil popular. "Además, tirar la Mobba nos permitirá también la urbanización de la calle Sant Isidre y la plaza de Roca i Pi". En los próximos días, ha explicado Albiol, el consistorio convocará una reunión con los vecinos para informar del calendario.

Así, el derrumbe tendrá lugar, si no se presenta ningún recurso de casación, después de los treinta días que marca la ley. Se da el hecho que el anterior Gobierno Albiol (que lideró el consistorio durante meses de 2020 y 2021), llegó a adjudicar el contrato para las obras de derrumbe: "Hay que ver si está aún vigente, lo sabremos durante la semana que viene". Si pueden usar el mismo contrato, todo será más rápido que si el consistorio ha de tirar adelante una nueva licitación. En todo caso, según ha dicho el alcalde, el derribo definitivo de la Mobba será "una cuestión de meses". "Ahora bien, no quiero poner una fecha porque en esta casa poner una fecha es, a menudo, equivocarse".

No hay ningún proyecto o diseño cerrado de cómo será la plaza, y el ejecutivo local tampoco descarta la instalación de algún equipamiento público en el lugar. Lo que está claro "es la idea clara e inamovible que ahí irá una plaza verde en términos generales". "Nadie que no sean los vecinos afectados decidirá cómo será la plaza, han suifrido mucho y han estado en medio de un fuego político que algunos han provocado".

Albiol ha negado que allí se puedan acabar construir pisos: "El proceso participativo para decidirlo será el más transparente del mundo: un micrófono, dos altavoces y los vecinos opinando".

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