En la C/Canigó

Evacuados los vecinos del edificio contiguo al derrumbado en Badalona al hallarse una grieta

Los Bombers y el arquitecto municipal evalúan durante la tarde del miércoles si existe afectación estructural

CONTEXTO | La tragedia del derrumbe del edificio de Badalona se salda con tres víctimas mortales

Gerardo Santos

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Mañana de tensión en la calle del Canigó de Badalona, una semana después del derrumbe que acabó con la vida de tres personas. Un vecino del tercer piso del número 7 (contiguo al número 9, el bloque siniestrado) ha descubierto este miércoles una grieta en una pared adyacente al edificio derrumbado y ha puesto en alarma al cuerpo de Bombers, que ha procedido a la evacuación de todo el inmueble tras certificar la aparición sobrevenida de la grieta y descubrir una segunda en el primer piso.

"Las grietas podrían estar causadas por el derrumbe de la semana pasada", ha informado el alcalde de Badalona, Xavier García Albiol. Técnicos del Ayuntamiento y equipos especializados de los bomberos prevén trabajar durante todo este miércoles para esclarecer el origen de las grietas: "Las primeras medidas han consistido en el apuntalamiento de varias estancias", ha informado el alcalde, que ha avanzado también que este miércoles, sobre las 21:00 horas, se vovlerá a reunir con los vecinos para informarles de cualquier novedad referida a la inspección del inmueble.

Sobre las posibles causas del derrumbe del pasado martes, el alcalde Albiol ha declarado que existen tres informes, aún abiertos: el de Bombers, el de Mossos d'Esquadra, y el del propio Ayuntamiento de Badalona.

Entre los vecinos, aún con la tragedia en la memoria, abundaban tras la evacuación las maletas, transportines con mascotas y caras nerviosas. "He hablado con ellos, están preocupados pero serenos, y les he transmitido que los vecinos cuyas casas no son contiguas al número 9 podrán volver a entrar para recoger más pertenencias", ha explicado Albiol. No en vano, en un primer momento los vecinos del número 7 han tenido que salir practicamente con lo puesto: "Llevaba dos días sin dormir en casa porque tenía mucho miedo―explica Sara Blanco, vecina de los bajos del bloque desalojado este miércoles―. Cuando he llegado a casa me he duchado y cuando estaba saliendo del baño, aún con la toalla, los bomberos han tocado a la puerta y me han dicho 'vístete y sal, ya'".

Lo que es seguro es que no podrán volver a sus casas a dormir este miércoles, de manera que el consistorio badalonés ya ha activado a los servicios sociales y contactado con el CUESB para acoger a los vecinos. Aún así, según ha explicado el alcalde, todos los residentes en el bloque desalojado han asegurado que disponen de otras alternativas habitacionales en casas de amigos o familiares.

"El lunes pedimos a la Generalitat la creación de una mesa de emergencia para tomar las acciones necesarias e inspeccionar toda la promoción inmobiliaria, nos reuniremos este mismo viernes", ha anunciado el alcalde Albiol. Los bloques que van del número 5 al número 15 de la calle del Canigó pertenecen a la misma promoción, algo que preocupa al consistorio. Bombers de la Generalitat confirma que, tras una inspección llevada a cabo este miércoles, no se encuentran grietas en el otro edificio contiguo al siniestrado, el número 11.

Exterior del número 7 de la calle Canigó de Badalona, vecino del inmueble derrumbado, y donde se ha localizado una grieta

FOTO: ELISENDA PONS | VÍDEO: ACN - Albert Segura

Sara explica que apenas ha podido agarrar el bolso, el móvil y la tableta. Ha dejado las llaves de su casa a la policía local, para que durante la tarde puedan entrar a verificar el estado de la estructura de la vivienda. Para Sara, la situación es "traumática", y "hace que uno se replantée la poca importancia que tienen en la vida las cosas materiales".

Esta vecina se encontraba en su habitación el pasado martes, día del derrumbe: "Estaba en la cama y me quedé paralizada, escuché como un trueno, o unos cuantos, duró 15 segundos. Después, como un terremoto que hizo vibrar toda la casa. Cuando pude reaccionar miré por la ventana, vi salir humo blanco de otra ventana y llamé a emergencias". "Esa misma noche, escuchaba el ruido de los bomberos desescombrando y el ladrido de los perros cada vez que encontraban un cuerpo, eso no se me va de la cabeza", narra Sara.

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