Diferencias entre partidos

Las discrepancias con Guanyem abocan a Guijarro a una cuestión de confianza para aprobar el presupuesto en Badalona

El grupo municipalista avisa al PSC de que este tipo de operaciones "las carga el diablo"

El alcalde de Badalona, Rubén Guijarro, en una entrevista con la ACN.

El alcalde de Badalona, Rubén Guijarro, en una entrevista con la ACN. / ACN / Albert Segura

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El pleno del Ayuntamiento de Badalona (Barcelonès) rechazará este martes el presupuesto municipal para 2022, siempre que no haya ningún nuevo giro inesperado. El gobierno está en minoría (12 de 27 concejales) y el PP y Guanyem ya han anunciado que votarán en contra, a pesar de que durante algunas semanas el grupo municipalista se había sentado a negociar el contenido. Sin embargo, la petición de Guanyem de entrar en el gobierno dinamitó las conversaciones.

Las cuentas, pues, llegan al pleno sin acuerdo y ya se habla de un 'plan B'. El primer teniente de alcalde, Àlex Montornès dice que si la oposición tumba el presupuesto se recurrirá a una cuestión de confianza del alcalde, el socialista Rubén Guijarro. Desde Guanyem avisan que este tipo de operaciones políticas "las carga el diablo".

La última cuestión de confianza en Badalona para intentar aprobar un presupuesto la presentó precisamente la exalcaldesa de Guanyem y ahora diputada de la CUP, Dolors Sabater. Fue en el 2018 y pese a que en 2015 Sabater había contado con el apoyo del PSC para ser investida, tres años más tarde le presentaban una moción de censura con el PP.

Ahora Guijarro podría optar por esta misma fórmula por intentar aprobar las cuentas, con la tranquilidad de que el acuerdo entre Guanyem y el PP para desbancarlo es del todo imposible. "Si no se aprueba mañana se aprobará en dos meses", ha afirmado este lunes el primer teniente de alcalde, Àlex Montornès, durante un encuentro con los medios de comunicación.

Tensiones reavivadas

Montornès asegura que Badalona vive una "crisis económica y social sin precedentes" y pide que se pongan facilidades para que todos los recursos disponibles se utilicen para la "reconstrucción". El primer teniente de alcalde, a pesar de los tiranteces y posicionamientos de los grupos, mantiene hasta última hora la esperanza de que las cuentas puedan salir adelante.

De hecho, bastaría con que dos concejales de la oposición se abstuvieran en la votación para que el presupuesto prospere, un escenario impensable por ahora. El Ayuntamiento vive con el presupuesto prorrogado desde 2019 y uno de los grandes objetivos del gobierno actual, después de desbancar a Albiol con una moción de censura en otoño de 2021, era poder aprobar unas nuevas cuentas.

Sin embargo, el socio prioritario, Guanyem Badalona en Comú, no está predispuesto dar sus votos. Critican que desde hace tres semanas el gobierno municipal ha roto las conversaciones después de que exigieran entrar en el gobierno para garantizar la ejecución de las cuentas que se quieren aprobar. Además, aseguran que es un presupuesto irreal orientado a "hacer campaña electoral". El presidente del grupo municipal de Guanyem Badalona, Toni Flores, admite que las relaciones con el gobierno municipal pueden quedar deterioradas lo que resta de mandato a partir de ahora. El gobierno que lidera el PSC, recuerda, está en minoría y es él quien está "obligado" a ganarse la confianza de sus socios.

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