Lichis: «Mi carrera es un decálogo del malditismo»

–Nos hemos de creer este carpetazo a La Cabra Mecánica.

–Sí, porque al ser una despedida acompañada de un disco y una gira está claro que no se trata de una salida por la puerta de atrás. Queda cerrada cualquier vía para retomar un proyecto que me pesa como una losa.

–Pero si La Cabra Mecánica es usted y solo usted (el resto de músicos han ido cambiando), ¿se puede uno separar de sí mismo?

–No sé si supimos aprovechar la llegada de La Cabra, pero he intentado saber irme a tiempo. Quiero romper con un personaje con el que no me identifico, con ese rumbero canalla con el que más se me asocia. Necesito sentir de nuevo el vértigo de volver a componer y salir al escenario sin tener bajo la manga una lista de canciones que sé que gustarán.

–En Carne de canción hay versiones de hits como Todo a cien y tres piezas inéditas entre las que destaca Carne de canción hitsTodo a cien Valientes.

--Valiente, temerario ¡y kamikaze! El público no suele aceptar los cambios. Sé a lo que me expongo. Pero hasta yo estaba cansado de mi uso y abuso del acento madrileño.

–Una curiosidad: ¿qué tal vive las gestas del Barça un madrileño de Lavapiés instalado en Terrassa y ¡seguidor del Atleti!?

–Pues mira: al Atleti le sigo con dramatismo, pero como también soy del Barça... Pero como el Barcelona casi siempre gana algo, al final uno se acostumbra, mientras que ser del Atleti te da un sentido realista y trágico de la vida.

–Ahora su apodo artístico será un diminutivo [su nombre real es Miguel Ángel]. Pero si se rebautiza como Miguelito es por la canción que le dedicó con este mismo nombre Jairo del grupo Lavacazul, ¿verdad?

–Es un homenaje que él me hizo, sí, con su nueva aventura como DePedro. Me visitó cuando yo estaba en un momento muy triste y me compuso esta canción para darme ánimos. ¡Qué necesitado estaba de estos gestos! Jairo fue el primero en saber mi decisión.

–Pero ¿qué le pasó entonces? ¿Pecó usted de iluso? Porque fue a raíz del bombazo de No me llames iluso

–Sí. Jamás pensé que un lema publicitario que musiqué para una agencia de publicidad jugaría en mi contra. Se tradujo en un desplome en ventas y contratación. Se dio una falsa sensación de éxito con una canción que nunca sentí mía: era una mezcla entre Leonardo Dantes y Georgie Dann. Mi carrera es un decálogo del malditismo, con pequeñas gotas de éxito.

–Y también logró que María Jiménez triunfase. Usted la rescató para cantar a dúo La lista de la compra

–María es más de verdad que las penas. Fue una experiencia friki, transgresora. Esto es algo que me llevaré a la tumba.

La Cabra MecánicaBikini • Sábado 24 • 21.00 horas • 18 €