UNA PELÍCULA CANDIDATA A CINCO OSCAR

El ocaso de un presidente

Ron Howard reconstruye en 'El desafío: Frost contra Nixon' el cara a cara televisivo entre un popular presentador y el controvertido líder político

33 Frank Langella, como Nixon.

33 Frank Langella, como Nixon.

QUIM CASAS
BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Nominada en cinco categorías a los próximos premios Oscar, entre ellas mejor película, director (Ron Howard) y actor (Frank Langella), El desafío: Frost contra Nixon reconstruye las entrevistas televisivas que un popular presentador de programas de variedades, David Frost, mantuvo en 1977 con el presidente Richard Nixon, y la compleja dialéctica que se estableció entre ambos personajes. Frost logró que Nixon dijera ante las cámaras aquello que había negado desde el escándalo del Watergate que le costó la presidencia.

La película parte de la pieza teatral que David Morgan escribió sobre aquellos hechos, estrenada en Londres en el 2006 con Frank Langella como Nixon y Michael Sheen en el papel de Frost. Ambos repiten sus personajes en la versión cinematográfica y se convierten en los pilares del filme de Howard, director de Apolo 13, Una mente maravillosa o El código Da Vinci.

No es la primera vez que Nixon se transforma en figura cinematográfica de excepción. Con Nixon (1995), Oliver Stone escarbó en las miserias del personaje, pero rescató también alguna de sus virtudes; Anthony Hopkins estuvo excelente, aunque Langella aquí lo mejora. Una década antes, Robert Altman filmó en Secret honor (1984) un monólogo de Nixon, interpretado por Philip Baker Hall. En clave cómica, Matt Groening, el creador de Los Simpson, se cebó en el controvertido presidente en varios episodios de otra de sus series de animación, Futurama.

Aunque no aparecía físicamente, Nixon, como una sombra alargada y ominosa, estaba detrás de la trama de Todos los hombres del presidente (1976), thriller conspiratorio de Alan J. Pakula basado en el libro que escribieron los periodistas que destaparon el caso, Carl Bernstein y Bob Woodward, encarnados por Dustin Hoffman y Robert Redford.