Las dificultades de emprender

CEO por amor al arte: así es ser socio de una startup y no cobrar

Muchos emprendedores arrancan sus compañías tomando la decisión de no ponerse una nómina. ¿Cuánto tiempo es sostenible esta situación y por qué se lleva a cabo?

Muchos emprendedores arrancan sus compañías tomando la decisión de no ponerse una nómina. ¿Cuánto tiempo es sostenible esta situación y por qué se lleva a cabo?

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Alberto Payo

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En ocasiones en los medios de comunicación leemos y escuchamos historias de emprendedores que parece que se han metido en el ecosistema solo para forrarse a costa de los inversores o solo con la meta de llenarse los bolsillos. Sin embargo, existe una realidad muy dura en el mundo de las startups. Muchos emprendedores fundan sus empresas sin cobrar un duro y permanecen así durante algunos meses. Es una decisión difícil y que atañe a todos los socios.

“Es normal que al principio la gente suela tender a pensar que, si empiezas un proyecto y estás un tiempo sin cobrar de él, estás trabajando gratis, pero realmente esto no es así. Estás intentando que el proyecto prolifere y lo haga de la manera más rápida posible”, explica David Ayala, co-fundador de la agencia SEO Globsia y dueño del foro de marketing online soywebmaster.com. 

Este experto en SEO insiste en que los proyectos necesitan arrancar y al comienzo requieren inversión. “Si desde el principio todos los socios empiezan a ‘restarle’ dinero al proyecto, la inversión que se podrá hacer en el mismo será mucho más baja y por lo tanto estaremos retrasando el crecimiento del mismo”, añade.

Sin embargo, esto no siempre se comprende, porque cada socio puede tener unas expectativas u objetivos distintos. Así, pueden producirse tensiones e incluso el abandono de algunos en esta fase inicial. 

En el caso de la startup de robots submarinos Nido Robotics intentaron dejarlo todo claro desde el principio y diseñaron un método para saber qué cantidad podía corresponder a cada uno en el futuro. “Era crítico que cada céntimo se reinvirtiese, por lo que ideamos un algoritmo para valorar la aportación cada uno, que posteriormente se convirtió en la repartición de acciones de la sociedad”, cuenta para BYZness, su cofundador y CEO, Roy Petter Torgersen. 

En su algoritmo se consideraba que ni la idea ni los acuerdos con los proveedores valían nada, pero sí tenía en cuenta el valor de mercado de cada uno de los socios en el mercado laboral, las horas que echaban, así como las aportaciones no dinerarias y dinerarias. 

¿Cuánto tiempo se puede estar sin cobrar?

Los fundadores de Trucksters, una startup con un software de transporte que permite a los conductores un mismo vehículo en relevos, estuvieron 9 meses sin cobrar desde que dejaron sus trabajos con el fin de apoyar su proyecto. Para su co-fundador y co-CEO, Luis Bardají Izard, es muy recomendable poner sobre la mesa de cuánto ahorro se dispone y hacer una planificación financiera para saber lo que durará. 

“En nuestro caso la comunicación fue clave: los tres socios expusimos al inicio cuánto dinero teníamos ahorrado y cuántos meses podríamos subsistir”, destaca Bardají, quien también resalta la importancia del apoyo familiar. “Dos de los tres socios seguíamos viviendo con nuestros padres, y eso, aunque no suene ni muy moderno ni muy romántico, ayuda muchísimo en estas etapas iniciales”.

Más tiempo estuvieron en barbecho los fundadores de la aplicación móvil de alimentación sana GoPure. En total, pasaron 14 meses hasta que recibieron su primera nómina, una “pequeña retribución” para cubrir sus gastos mensuales. Pepe Núñez, co-fundador y CEO, cuenta que hay dos factores clave para conseguir superar estos meses de ‘sequía’. “Creo que el hecho de que nuestra motivación fuera más allá de nuestros intereses personales ha ayudado a superar la mayoría de las tensiones. Es muy importante que los fundadores estén alineados en cuanto a la visión del proyecto”, aconseja.

En Nido Robotics tardaron un año y medio en ‘autopagarse’, aunque al principio fue “más bien como una beca”. La decisión se produjo cuando contrataron a su primer empleado. “Generábamos suficiente cash flow para pagarnos esa ayuda, y decíamos que si teníamos dinero para contratar un trabajador, deberíamos pagarnos a nosotros también. También es cierto que, en meses de menos ingresos, retrasábamos los autopagos (pero no la nómina del trabajador)”, aclara. 

El cofundador de Trucksters revela que los socios pudieron empezar a cobrar cuando entraron en su accionariado empresas importantes, como Porsche, Axel Springer y Undanet. “Los inversores nos dieron ese respiro financiero que necesitábamos”, subraya.

Una decisión de la que no se arrepienten

Ninguno de los emprendedores que hemos consultado se arrepiente de no haber cobrado durante un tiempo. Todos creen que hicieron lo necesario y correcto para que sus empresas salieran adelante y volverían a hacer lo mismo en el futuro. 

Ayala habla de que la importancia de un proyecto es “tener miras a largo plazo”. Según el creador de soywebmaster.com, “no sirve de nada cobrar X dinero ahora y que en un futuro no muy lejano el proyecto fracase por falta de liquidez o falta de inversión en el mismo”. 

Bardají echa la vista hacia atrás y asegura que el dinero invertido les dio sus frutos en aprendizaje, contactos, una buena proyección, etc. Aunque reconoce que su situación inicial fue “relativamente sencilla, teníamos 25/26 años, y no teníamos hijos ni obligaciones financieras muy relevantes. Creemos que el mérito realmente está cuando estás en etapas personales más avanzadas, con hijos y una familia que mantener”, señala. “Es para quitarse el sombrero cuando ves emprendedores con esas responsabilidades que siguen apostando por sus sueños”.

El CEO de Nido Robotics, mantendría la decisión, pero con matices. “Lo único que cambiaría sería que, en lugar de empezar a pagarnos en julio del 2017, empezaría a poner unas nóminas en enero del 2017, aunque la empresa no las pudiese pagar. De esa forma, la sociedad iría generando una deuda con los socios que luego se puede convertir en capital social o sacar en cash más adelante cuando la caja lo permita”, comenta Torgersen.