Emprender a los 65 años: así puede ser tu 'jubilación'

Se avecinan cambios para la generación millennial. Una generación que vivirá más años y que, por tanto, deberá adaptarse a las consecuencias que trae el envejecimiento de la población. De hecho, según ha pronosticado la OCDE -Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos- en 2050, España será el territorio más longevo del mundo, con un 40 por ciento de la población por encima de los 65 años.

Sin embargo, este incremento de la longevidad puede traer también efectos positivos que permitan el crecimiento económico. Así lo reflejan el presidente de Mapfre, Antonio Huertas, y el director de Deusto Business School, Iñaki Ortega, en su libro La Revolución de las Canas.

Una revolución que está todavía por hacer y que traerá importantes cambios. “Los millennials y posmillennials, esos jóvenes conocidos por ser nativos digitales, tendrán que acostumbrarse a largas carreras profesionales en las que volveremos a la escuela varias veces para reinventarnos; en las que trabajaremos para varias empresas y con diferentes modalidades contractuales;o en las que compaginaremos periodos de trabajo con años sabáticos o meses para atender a nuestras familias”, explica Ortega.

En definitiva, los millennials tendrán que ser más previsores y concienciarse de que deberán ahorrar más y trabajar más que sus padres y abuelos. Una de estas opciones es emprender más allá de los 65 años. Un fenómeno que es ya una realidad: “En la actualidad, el número de mayores de 50 años en el mundo que son emprendedores supera al de los jóvenes de entre 18 y 29 años, conforme a los datos del Informe Especial GEM (Global Entrepreneurship Monitor) sobre emprendimiento sénior”, cuenta Ortega.

Según otros datos, como los aportados por la Fundación Kauffman, en Estados Unidos las personas entre 55 y 65 están ahora un 65 por ciento más dispuestas a iniciar compañías que los de 20-34.

En línea con todo ello, Ortega defiende que “los emprendedores séniors pueden gestionar sin problemas durante 20 años sus propios negocios”.

Precisamente, para alcanzar una vida laboral más larga, “es preciso pasar página de los estereotipos laborales”, cuenta Ortega, quien añade que “asociar el empleo a la presencia en el puesto de trabajo, identificar el trabajar como autónomo o el contrato a tiempo parcial con una economía precaria o que los séniores están incapacitados para la nueva economía son ideas que hay que desterrar”.

Llegan los 'viejennials'

Llegan los 'viejennials'En esta situación irrumpe un nuevo grupo social. Es lo que los autores de La Revolución de las Canas llaman los viejennials, es decir quienes han nacido a partir de 1965: “Son un nuevo grupo social con buena salud, en plenitud de capacidades y dispuestos a mostrar al mundo su experiencia en todos los ámbitos”, cuenta Ortega. Y es que según datos de la Comisión Europea, la población mayor de 55 años supondrá en 2025 el 37,8 por ciento de los empleos europeos. Trabajos en sectores como “la salud, el ocio, la vivienda, el urbanismo, la educación, la tecnología o las finanzas y seguros”, detalla Ortega.

El futuro de las pensiones

El futuro de las pensionesEn todos estos cambios también entrarán en juego las pensiones públicas. Un derecho que tal y como defiende Huertas no va a desaparecer aunque lo que se está cuestionando ahora es si serán suficientes.“Hoy la tasa de sustitución, la primera pensión respecto al último salario, se sitúa cerca del 80%, pero en todos los países de nuestro entorno se sitúa alrededor del 50% y lo que hacen nuestros vecinos es complementarlo con un programa de ahorro sistemático al que aportan habitualmente durante toda la vida laboral”, cuenta Huertas.

No tendría que ser por tanto el fin del estado del bienestar, aunque este sistema tal y como lo conocemos “no va a ser sostenible”, asegura el presidente de Mapfre, quien defiende que “habrá que redefinirlo porque no solo estamos hablando de pensiones, también hay una presión tremenda de la sanidad o de la dependencia, entre otros factores”.

¿Cómo vivir más?

¿Cómo vivir más?“Gracias a los avances médicos, a nuestra dieta y nuestro excelente sistema sanitario disfrutamos por ejemplo en España de un extra de quince años de vida de 1960 a nuestros días”, cuenta Ortega. La clave está por tanto en mantener un estilo de vida sano, lo que implica practicar ejercicio de intensidad regular, incluir principalmente productos a base de plantas en nuestra dieta o comer sin llenarse y no beber en exceso. Además de tener una vida en comunidad y luchar contra la soledad, tal y como recomiendan los autores de La Revolución de las Canas.