Móviles de segunda mano: consejos para comprar o vender

Tras el anuncio de los nuevos iPhone 12, muchos amantes de Apple han sentido el impulso de deshacerse de su smartphone para comprar el último modelo de la marca de la manzana. Acudir al mercado de segunda mano para tratar de recuperar parte de la inversión en el viejo móvil o para aprovechar esta fiebre para encontrar un móvil usado en buen estado siempre es una opción. Aunque conviene tener en cuenta ciertos aspectos para evitar sustos. 

De hecho, según un análisis elaborado por Milanuncios, los mayores volúmenes de oferta de teléfonos de Apple de segunda mano se producen justo cuando se anuncia el nuevo terminal: el día de la presentación de Apple el pasado 13 de octubre, los anuncios publicados de iPhone en venta aumentaron un 37%. 

A su vez, la demanda se dispara en Navidad y los primeros días del mes. Y tal y como explica Magalí Rey, directora de marketing de Milanuncios, este pico de búsquedas y compras de primeros de mes no sucede solo con los iPhone, si no que es algo que ocurre en toda la categoría de móviles. “Son productos que por lo general se compran para actualizar los dispositivos que ya se tienen y que pueden conllevar un gran desembolso de dinero, por lo que los comienzos del mes suele ser un momento en el que las búsquedas aumentan”, asegura.

El mercado de segunda mano

Un precio que puede oscilar entre 500 y 600 euros, que es lo que cuesta de media el teléfono más buscado en esta web de compraventa, que no es otro que el iPhone 11 de 64GB. Este importe es el que se gastaba el 16% de los españoles en un smartphone durante los momentos previos a la pandemia, mientras que el 45% destinaba más de 200 euros, indica el ‘Barómetro de la Vida Digital en Europa’ elaborado por Celside Insurance y Harris Interactive.

A la hora de cambiar de móvil, casi la mitad de los españoles suele guardar el antiguo en casa, mientras que el 31% se lo da a otra persona y el 10% lo vende en Internet. Solamente el 1% opta por tirarlo. Por edades, los jóvenes son los que más ceden o venden sus teléfonos (el 34% del total), frente al 26% de los mayores de 45 años.

¿Y cuando queremos comprar? El 55% de los encuestados en este barómetro considera adquirir móviles de segunda mano o reacondicionados por motivos de precio y contribución a la economía circular, aunque la realidad es que solo el 17%  lo ha hecho en la época pre pandemia. Ahora, quizás este porcentaje crezca al tener que apretarnos el cinturón un poco más debido a la crisis económica por la que atravesamos. 

Así pues, si estamos pensando en acudir a una plataforma de segunda mano para vender o comprar nuestro teléfono, no está de más tener en cuenta revisar ciertos puntos clave antes de cerrar una transacción con un desconocido. 

Si voy a vender

Si nuestro caso es el del vendedor, hay una serie de recomendaciones que nos van a ayudar a agilizar la venta. Además del precio, el aspecto en el que más se fija el consumidor es la estética según asegura Carlo Alberto Rolando, fundador y CEO de iRiparo, la  red de tiendas especializada en reparaciones de dispositivos móviles. Por este motivo, es importante prestar especial atención a las fotos, que deben ser de calidad y mostrar bien el móvil. 

En segundo lugar, debemos prestar atención a la información que aportamos: “Incluir una descripción detallada del producto, si incluye instrucciones, si cuenta con garantía en vigor, etc”, aconsejan desde Milanuncios. 

También hay que especificar de forma clara los datos de contacto, referencias y su disponibilidad para atender a los compradores. Otro factor extra que con el que descartamos por ejemplo que se trata de un robo es indicar que cuenta con factura, “ya que ahí aparecerá la fecha de compra y en base a eso sabrá si tiene garantía en vigor, sabrá dónde fue adquirido, si se trata de un establecimiento oficial, etc”, explica Magalí Rey.

¿Más consejos con los que cerrar una venta exitosa? Incluir palabras como ‘precio negociable’ o ‘escucho ofertas’ “animan a los compradores”, detalla la directora de marketing de Milanuncios. 

Además expresiones como ‘entrega en mano’, ‘acepto cambios’ o ‘gastos a cargo del vendedor/comprador’ proporcionan una información extra que suele ser bien valorada, al igual que aportar algún dato sobre por qué nos estamos desprendiendo del terminal. “Por ejemplo, en el caso de los smartphones añadir en la descripción que es para adquirir el nuevo modelo que acaba de salir al mercado”, afirma.

Si voy a comprar

Cuando nos damos una vuelta por las distintas plataformas de segunda mano en busca de un móvil, hay señales que nos van a indicar si estamos ante un chollo real o ante una estafa y debemos estar alerta. 

“Si se trata de un precio que está muy por debajo del precio medio del resto de productos, debe hacernos sospechar. Si parece demasiado bonito para ser verdad, es probable que no lo sea. Además, el comprador debe rechazar cualquier anuncio que tenga como requisito el pago por adelantado. No suele ser una buena señal”, resume Magalí Rey.

Si se trata de un precio que está muy por debajo del precio medio del resto de productos, debe hacernos sospechar"

Una vez superada esta primera fase, desde iRiparo mencionan diversos aspectos técnicos que distinguen un teléfono en buen estado de otro con más kilometraje y que conviene no pasar por alto. “Los terminales de segunda mano pueden venir dañados estéticamente o internamente. Estos últimos son los que pueden llegar a hacer que ese terminal quede “inservible”, entre comillas, ya que la mayoría de problemas pueden solucionarse”, explica Carlo Alberto Rolando.

¿Qué va a ser más fácil de identificar a simple vista? Que un terminal tenga la pantalla intacta “es una buena señal”, define, ya que es más costosa de sustituir que por ejemplo una batería. 

También debemos buscar en el anuncio la información relativa a los accesorios, y pedirla en el caso de que no figure. “En muchas ocasiones no nos dan ni el cargador con la adquisición del terminal”, recuerda el CEO de iRiparo, quien destaca la necesidad de saber qué tipo de accesorios, sí trae el terminal para evitar sobrecostes de última hora. “Nosotros creemos que los terminales deben venderse con una caja y accesorios nuevos y así lo hacemos obviamente, incluidos en el precio, sin sorpresas de última hora”, añade.

Una forma infalible de asegurarnos de que estamos adquiriendo un smartphone operativo es probarlo antes de comprarlo. Es decir, tenerlo en nuestras manos y revisar que el modelo coincide con la descripción, que el teléfono se enciende, que no hay desperfectos no indicados, que la conexión a Internet o por bluetooth funciona o que la batería se carga bien.

A su vez, es útil saber que a día de hoy existen varios programas que “mediante un ordenador de por medio nos permiten testear el terminal”,  apunta Rolando. Además, muchas marcas tienen un modo test en sus terminales, con lo que “podemos acceder a un menú oculto con una combinación de números que nos permiten verificar el buen estado del terminal”, añade.

Ojo con los pagos

¿Y si el teléfono nos gusta mucho y creemos que tiene un precio justo, pero trae algún desperfecto? Desde iRiparo afirman que la mayoría de daños se pueden solucionar “con un coste inferior al de la adquisición de un terminal nuevo”. Eso sí, hay que tener en cuenta que existen problemas que será complicado reparar, como pueden ser los que afecten a la placa base del teléfono.

Una vez que tenemos clara toda la información y estamos dispuestos a cerrar la transacción, queda el último paso: el pago. En este punto no debemos bajar la guardia y hay que optar siempre por un método que sea fiable para ambas partes. En este sentido, el equipo de Milanuncios hace hincapié en rechazar el pago por adelantado y que, si es posible, se haga el pago en persona, lo que también posibilita que el comprador vea "directamente el estado del dispositivo antes de finalizar la compraventa”.