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Apostar por la aviación sostenible sin renunciar a su asequibilidad

Cuatro ponentes analizaron, en un encuentro en EL PERIÓDICO, la situación del sector de la aviación y debatieron sobre el proceso de descarbonización, la apuesta por los combustibles sostenibles y los nuevos desafíos aéreos  

Participantes de la mesa redonda sobre aviación sostenible acompañados por el director de EL PERIÓDICO en Barcelona.

Participantes de la mesa redonda sobre aviación sostenible acompañados por el director de EL PERIÓDICO en Barcelona. / ZOWY VOETEN

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La descarbonización del transporte aéreo es un tema que está muy presente, y cada vez más, en la agenda de actualidad de nuestro país. La aviación es un sector fundamental para la economía global, puesto que facilita la conexión de las personas de una forma ágil y asequible. Aun así, es un sector que debe replantearse algunas cuestiones en clave medioambiental y una de las más importantes es la reducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera. El proceso de descarbonización es el punto de partida para reducir estos gases contaminantes, aunque existen algunos límites como la dificultad para electrificar la aviación, que por lo pronto no parece posible. 

Las alternativas que ya forman parte de la realidad son los combustibles sostenibles de aviación (SAF) y el hidrógeno, que ayudan a reducir la emisión de CO2 convirtiendo la aviación en un sector más sostenible. Para hablar de todo ello, EL PERIÓDICO organizó una mesa redonda sobre “Aviación verde” donde participaron los siguientes ponentes: Franc Sanmartí, director de sostenibilidad de Vueling; Isabel Garcia, directora de Operaciones Planning & Control de Vueling; Álvaro Macarro, director de aviación sostenible de Cepsa; y Gema Haro, jefa de la división de medioambiente de Enaire. Los cuatro ponentes, moderados por Albert Sáez, director de EL PERIÓDICO, pusieron de relieve la cohesión y la hermandad que caracteriza el sector de la aviación. “La colaboración público-privada nos permitirá alcanzar los objetivos de cero emisiones netas”, destacaba Sanmartí. Según Macarro, de Cepsa, este tipo de ayudas y políticas, harían incrementar la demanda y serían capaces de bajar el precio. “Actualmente, el combustible sostenible cuesta entre 3 y 6 veces más que el combustible fósil tradicional”. Los precios del SAF son una de las principales barreras para su utilización. 

El SAF como alternativa

Existe una fecha para conseguir reducir la huella de carbono y alcanzar las cero emisiones netas y es el 2050. “El compromiso es total, habrá un coste de descarbonizar el sector, pero el apoyo del sector público puede ayudarnos a hacerlo realidad”, remarcaba Sanmartí. Cabe destacar la situación en la que se encuentra el sector, que viene de una profunda crisis durante la pandemia de la Covid-19 y, aunque está recuperando su estabilidad, no alcanza aún los datos de 2019. “El 65% de esta descarbonización va a ser posible gracias al uso de los SAF, que pueden reducir hasta un 90% las emisiones de CO2 en comparación con el queroseno tradicional y sin necesidad de adaptar ni los motores de los aviones ni la infraestructura aeroportuaria”, apuntaba Macarro. Estos combustibles se crean a partir de residuos agrícolas, forestales, aceites de cocina usados, entre otros, y son sostenibles. Hoy en día, se usa esta alternativa al combustible fósil. En España ya se produce en Huelva en un parque energético y se aplica en los cinco aeropuertos principales del país. Él mismo distinguía entre los dos tipos de combustible sostenible que existen: el SAF orgánico y el SAF sintético. Sanmartí añadió que “según un estudio de PwC, usando el 10% de los residuos disponibles, España podría ser energéticamente independiente para la obtención del SAF”. 

«El coste de la descarbonización existirá, pero somos optimistas con la colaboración público-privada»

Franc Sanmartí

— Director de sostenibilidad de Vueling

Por su parte, Garcia quiso destacar que el SAF forma parte ya de una de las medidas que ayudan a Vueling a reducir las emisiones de CO2, pero que no es la única. Desde 2015 Vueling viene trabajando la sostenibilidad desde cuatro grandes pilares como, la planificación de la ruta y del avión lo más eficiente posible, reducir el peso del avión y mitigar el deterioro del rendimiento de la flota con el uso, optimizar la carga de combustible a las necesidades operacionales y volar de la forma más eficiente en el día del vuelo”. Haro destacó un dato importante: “Los aviones, en comparación con los años cincuenta, son un 75% menos ruidosos. Debemos tener una visión global de la descarbonización”. Desde Enaire se han cerrado tres iniciativas en su plan estratégico ambiental Green sky: reducir las emisiones de los aviones, reducir la afección acústica y reducir las emisiones asociadas a su actividad. “Queremos mejorar la eficiencia horizontal y vertical”. Uno de sus objetivos es el de fijar rutas más rectas para las aeronaves, “para hacerlo modernizamos el sistema de radio ayudas terrestres”. Precisamente, Enaire, Vueling y Eurcontrol han creado un grupo pionero que trabaja con el objetivo de optimizar las trayectorias de vuelo. Lo que, según añade, Sanmartí, “contribuiría a reducir el consumo de combustible aproximadamente en un 10% y en consecuencia también las emisiones.”

«Tenemos muy en cuenta la planificación de las rutas, el peso de los aviones y su rendimiento para reducir las emisiones»

Isabel Garcia

— Directora de Operaciones Planning & Control de Vueling

Actualmente, ya se está utilizando el SAF en la aviación: “Fuimos pioneros en suministrarlo en el Aeropuerto Josep Terradellas-El Prat”, explicaba Sanmartí. Él mismo quiso definir el mayor reto que hay frente este tipo de combustibles: “Pasar del 0,1% actual de producción mundial de combustible sostenible a unos volúmenes que nos permitan tener el 70% en 2050”. Para conseguir este objetivo, los cuatro ponentes pusieron de relieve la colaboración público-privada. Esta inversión, además, se prevé que aumentaría cerca de cuarenta mil puestos de trabajo en nuevas plantas de producción en Catalunya.  

Vuelos más sostenibles

El objetivo de Enaire es apostar por la tecnología satelital en 2030, que les permita ser más flexibles en el diseño de nuevas rutas. “También estamos trabajando para conseguir unos descensos optimizados que permitan consumir menos combustible durante la frenada final del avión”, explicaba Haro. La media de este tipo de descensos en España actualmente es del 35%, mientras que en Europa es solamente el 18%. “Somos líderes en descensos eficientes”. Garcia coincidía en que apostar por este tipo de acciones, ayuda a ser más sostenibles. Desde este verano los pilotos de Vueling disponen de información más precisa y actualizada al momento de los vientos durante el descenso en vuelos de más de 90 minutos. Para el próximo año se quieren cubrir todas las rutas y que la información llegue directamente a la aeronave para reducir aún más el impacto de CO2.

«El nivel de unanimidad en el sector de que la aviación es sostenible o no será, es absoluta»

Álvaro Macarro

— Director de aviación sostenible de Cepsa

Está comprobado que los vuelos que realizan su trayecto en línea recta y con mayor altitud, son los que emiten menos CO2. “Se ahorran un 10% de emisiones”, apuntaba Sanmartí. Uno de los temas de actualidad es el debate sobre la eliminación de los vuelos que se puedan realizar en transporte ferroviario de hasta dos horas y media. Los cuatro ponentes coincidían en que la reducción de emisiones que se consigue es mínima por ahora y, por el contrario, podría potenciar la salida a otros países para vuelos de escala. “Eliminar estos trayectos, como podría ser Barcelona-Madrid, solamente reducirían un 0,9% las emisiones del sector aéreo. Estamos a favor del tren, pero necesitamos que estos lleguen a los aeropuertos para que haya mayor sinergia entre medios de transporte”, explicaba Sanmartí. Una posible solución pasa por “utilizar el SAF orgánico que reduce un 80% las emisiones y no eliminar trayectos cortos”.

Haro quiso destacar que las áreas donde más urge actuar son la apuesta por el SAF, las mejoras en fabricación de motores, las medidas económicas y las medidas de gestión del espacio aéreo. “Tenemos capacidad de reducción de entre un 6 y un 10%”. 

«Vamos en camino de alcanzar la neutralidad de carbono en 2050, entre 2017 y 2022 reducimos 8 millones de millas náuticas»

Gema Haro

— Jefa de la división de medioambiente de Enaire

España recibe 8 de cada 10 turistas en avión y el 12% de su PIB proviene del turismo. La limitación del sector de la aviación podría afectar gran parte de la economía de nuestro país. “Debemos relativizar, ya que a nivel europeo el 75% de las emisiones de CO2 provienen de los transportes por carretera. Tenemos que trabajar para hacer la aviación más sostenible, pero los números son favorables”, quiso apuntar Haro. Como desafíos a corto, medio y largo plazo, los cuatro ponentes estuvieron de acuerdo que está la prioridad de potenciar el SAF y la descarbonización del sector. “Estamos muy contentos con lo que hemos conseguido hasta el momento en eficiencias operacionales, reducir en promedio entre un 3-7% las emisiones de un vuelo regular es ya un éxito, pero para llegar a los objetivos de 2050, necesitamos la democratización del SAF.”, concluía Garcia. Por su parte, Macarro aseguró que España será un hub de producción de SAF en Europa, pero “sin olvidar que uno de los grandes logros de la aviación es la conectividad y debe seguir siendo asequible para las personas”. 

Finalmente, Sanmartí quiso hacer una llamada a la acción. “El desafío principal es del de implementar incentivos para acelerar la producción de los combustibles sostenibles y para rebajar su precio”. Haro cerró su aportación recordando de nuevo el objetivo de 0 emisiones en 2050 y recalcó que “se conseguirá si se trabaja de manera colaborativa”.