¡Terminó la guerra, Ana Guerra! Su lucha con los piojos: 13 años de CASI NADA

'El Hormiguero' es especialista en invitados de primera línea, y también en hacer que esos mismos invitados cuenten novedades absolutamente sorprendentes. Esta vez la estrella ha sido Ana Guerra (27), quien ha ido a presentar 'Tik Tak', su nuevo single. Es una canción en la que nos enseña "su verdadera identidad", pero lo alucinante es otra cosa que ha dicho la extriunfita: ha tenido piojos durante 13 años. Sí, 10+3.

Tal cual te lo contamos. En su entrevista, la cantante ha hablado de una gran cantidad de temas personales, pero ha habido uno que nos ha dejado a todxs con ganas de rascarnos la cabeza.

"¿Es verdad que durante tu infancia, durante 13 años, tuviste piojos?", le preguntó el presentador dejando la canaria sin saber muy bien cómo reaccionar. "Sí, me daba pena matarlos", empezó por explicar. Ana cree además que debe de tener una sangre muy rica porque dichos bichejos le dieron muchísima guerra (chistaco). "Sí que es verdad que tuve durante 13 años seguidos. Me puso todo lo posible, me bañé en vinagre, me corté el pelo, hice todo lo que se podía hacer y no había manera de quitarme los piojos", explicó. Y nosotras añadimos: los piojos y las liendres en la infancia son de lo más común, 'cielas'. Que levante la mano quién nos los tuvo...

Pero hay más. Según ha contado, Ana utiluzaba los piojos como arma de guerra (chistaco número 2) contra su propio hermano Joaquín. "Lo usaba un poco a mi favor y cada vez que mi hermano se enfadaba conmigo, yo cogía uno y se lo tiraba a la cabeza", confesó.

La buena noticia es que ahora, ya en la vida adulta, Ana no tiene ni un solo bicho. Ha logrado quitárselos de la cabeza (chistaco número 3), y oye, saca single. Una canción muy personal, por lo que hay que escucharla sí o sí. "Ya no los tengo. ¡Qué horror, que estamos en prime time!", se ha quejado la de 'Operación Triunfo'.

Por último, una referencia a otra de las anécdotas que ha compartido la cantante. Como sabes, a ella siempre le ha gustado tocar el piano, sobre todo por la noche. Un día, durante su infancia, recibió una carta de parte de sus vecinos. Le pedían que no lo hiciese o cantase a las 00:30 porque había gente que a esa hora necesitaba dormir. Vamos, que a Ana la guerra no se la han dado solo los piojos... ¡Los vecinos también! (Chistaco final.)