Sánchez acusa al "inmovilismo" del PP de amparar que el secesionismo "subiera como la espuma"

El líder del PSOE cree que en la legalidad "hay espacio" para evitar la fractura de la convivencia

JULIA CAMACHO / SEVILLA

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El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha arremetido esta tarde contra el “inmovilismo” del PP y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, una actitud a la que responsabiliza de “la subida como la espuma” del secesionismo en Catalunya. No obstante, se ha mostrado convencido de que en el marco de la ley hay aún “espacio para renovar el pacto por la convivencia” y evitar por tanto que se produzca la ruptura de España.

En un mitin de precampaña ante unas 2.000 personas en Viator (Almería), en el tanto él como la líder andaluza Susana Díaz han querido ofrecer una imagen de cierre de filas y de dejar atrás sus discrepancias, el jefe de los socialistas ha considerado que el culpable del desafío secesionista es Artur Mas, aunque también el presidente del Gobierno ha tenido su cuota de responsabilidad al permitir que ese sentimiento de ruptura se fuera incrementando.

"Pero sabemos que la mayoría de los catalanes no quieren ni inmovilismo ni ruptura", ha aseverado, asegurando a continuación que hay espacio en el marco de la legalidad para responder a ese reto de "renovar el espacio de convivencia y evitar que se fracture Catalunya". "En eso está el PSOE", ha dicho, subrayando que su partido tiene "muy claro" que estará siempre "en la defensa del orden constitucional, la unidad de España, la igualdad de los españolas y la legalidad democrática".

En la misma línea, Díaz ha reprochado que el Gobierno del PP parece que "solo se ha movido cuando los independentistas se le han subido a las barbas", pese a que hace ya dos meses en un encuentro con Rajoy le reclamó que "no hay tiempo de descuento" para solucionar el tema catalán. "Pues hemos llegado hasta aquí", señaló, para apelar a continuación a la unión de "todos los ciudadanos, todos los partidos y todos los pueblos de España" ante alguien que "intenta saltarse la democracia", en alusión al 'president' en funciones de la Generalitat, Artur Mas, al que ha recordado que los tribunales constitucionales se crearon para que "ninguna mayoría en unas elecciones pudiera saltarse la ley".

"Nos estamos jugando España, y nadie tiene derecho, ni ninguna opción, de dividir Catalunya y separarla de España", ha dicho, reclamando “unidad y firmeza”. Y en este escenario, ha subrayado la necesidad de contar con un presidente "que garantice la unidad de España y la igualdad de todos los ciudadanos, vivan donde vivan, siempre, en cualquier momento y en cualquier lugar", comprometido, que de seguridad, confianza y convivencia a este país.

Ya en clave electoral, el líder de los socialistas ha recordado que “lo mejor ye le ha pasado siempre a España ha venido de la mano del PSOE”, por lo que ha instado a los militantes a mirar “con orgullo al pasado” para ganar las próximas elecciones el 20 de diciembre. Sánchez ha presentado al PSOE como el "único cambio posible" para frenar a la "derecha reaccionaria", asegurando que los cuatro años de gobierno del PP solo han generado "paro, desigualdad y corrupción" y que ha confundido "patria con patrimonio y mayoría absoluta con absolutismo".

"VIEJOS CONOCIDOS"

También ha tenido palabras para las formaciones emergentes, de las que ha dicho que aunque surgen ahora "son viejos conocidos". "Podemos son las Juventudes Comunistas, aunque Juan Carlos Monedero eleva un poco la media de edad", ha ironizado, mientras que de Ciudadanos ha asegurado que son "la derecha del copago y el contrato único".

"Nosotros no necesitamos reivindicar nuestra patria porque nuestra patria está en las escuelas públicas" o en las leyes de derechos sociales, ha aseverado apelando al legado de los expresidentes Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero. Y se ha comprometido a derogar la ley mordaza y la reforma laboral, convirtiendo el estatuto de los trabajadores en una carta de derechos; ha abogado por implantar un sistema de cotizaciones progresivas en función de los ingresos para los autónomos, y a elevar el salario mínimo interprofesional hasta los 1000 euros en el plazo de dos legislaturas, además de revitalizar la Ley de Dependencia para que incluya nuevos dependientes.