Ferrer avanza a la tercera ronda

Feliciano López pasa tras vencer a Mardy Fish y se medirá con Raonic, que despidió a Verdasco

Ferrer devuelve un revés en su partido frente al serbio Krajinovic.

Ferrer devuelve un revés en su partido frente al serbio Krajinovic. / periodico

IDOYA NOAIN / NUEVA YORK

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Ni David Ferrer ni su equipo saben muy bien qué pasó. Durante dos meses, el tratamiento para la lesión de codo que llevó al de Xàbia a retirarse de Wimbledon y le alejó de las pistas todo el verano no hacía efecto. De repente, todo cambió y la recuperación empezó a pasos agigantados en diez días. El Abierto de Estados Unidos se presentaba como la oportunidad de volver y ver cómo el número 7 del mundo podía actuar, consciente de que tendría que convivir con el dolor. Y su segunda victoria, ayer frente al serbio Filip Krajinovic, le ha probado que el codo molesta, pero no frena.

Ferrer ha superado el calor asfixiante de este martes (31 grados) y los problemas con su saque en el segundo set y se aseguró con un 7-5, 7-5 y 7-6 (7-4) el pase a tercera ronda. Allí le espera el francés Jeremy Chardy, número 28 del mundo, pero Ferrer quería darse al menos unas horas «para disfrutar del momento», de este regreso en las que no las tenía todas consigo y en el que ahora se siente «cada día con más confianza», aunque sienta aún las limitaciones en los primeros saques y al devolver cortado. Incluso se ha quitado el vendaje que se puso el primer día, porque «quita elasticidad a la hora de sacar».

Feliciano tiene suerte

Una ruta bien distinta hasta la tercera ronda tuvo Feliciano López, que no estaba para demasiadas celebraciones. El toledano se impuso 2-6, 6-3, 1-6, 7-5 y 6-3 a Mardy Fish, el estadounidense que pasó un par de años alejado de las pistas por problemas de ansiedad y físicos y que había anunciado de antemano que se retiraría tras este Abierto.

Frente a un López desdibujado respecto a buenas actuaciones recientes en cemento como la de Cincinanati, Fish tuvo en su mano la victoria sirviendo en el cuarto set con 4-5. Se desvaneció, no obstante, tras desaprovechar esa oportunidad y en el quinto se hundió bajo los calambres, un final que López sabía injusto. «Él merecía haber ganado, ha sido mejor jugador –decía el 18º cabeza de serie–. Yo tuve suerte».

Es un mensaje que le transmitió en persona al de Minnesota cuando se encontraron en la red tras el encuentro. Lo repitió también cuando habló ante las cámaras para el público local. Y lo dijo también en su encuentro ante la prensa, donde definió además a Fish como «un auténtico caballero», una especie que no siempre es la que domina en las pistas.

López tiene unas horas para reencontrarse con su juego para medirse en tercera ronda al canadiense Milos Raonic, décimo cabeza de serie, que avanzó ayer dejando en el camino a Fernando Verdasco con un 6-2, 6-4, 6-7 (7-5), 7-6 (6-1). Y augura uno de sus partidos habituales: «igualados, con mucho tie beak».

Bautista gana a Carreño

Bautista gana a CarreñoTambién en tercera ronda, pero frente al belga David Goffin, estará Roberto Bautista Agut, que se impuso a Pablo Carreño Busta 4-6, 6-4, 6-0, 2-6 y 6-4 en un partido tan lleno de altibajos como indica ese marcador. Mientras el gijonés acusaba un bajón en ese tercer ser en el que no logró ni un juego, el de Castellón lo sufría en el cuarto. Pero fue Bautista quien finalmente jugó mejor en los momentos difíciles, cerró el partido «con decisión» y volvió a dar otro paso para acercarse a los octavos, donde ya estuvo el año pasado en Flushing Meadows y este año en Wimbledon. Más que su rival, Bautista dice estar preocupado por el calor.