'El instante más oscuro' y otras transformaciones extremas

Quizás sepas ya que 'El instante más oscuro' es la película que finalmente va a proporcionar a Gary Oldman su primer Oscar. Eso, al menos, es lo que todos dan por hecho -ya le ha dado el Globo de Oro-. En el filme, el actor encarna a Winston Churchill durante mayo de 1940, periodo en el que el recién nombrado primer ministro británico tuvo que decidir si su país debía luchar contra los nazis o intentar negociar con ellos la paz.

Más de 200 actores han encarnado a Churchill a lo largo de los años, pero ninguno como lo hace Oldman. El inglés, que le tiene cogido el gusto a interpretar personajes históricos -ha sido Dylan Thomas, Ludwig van Beethoven, Poncio Pilato, Sid Vicious, Lee Harvey Oswald y Vlad el empalador, entre otros-, se sirve del maquillaje y las prótesis para, literalmente, desaparecer dentro de su papel: compara las fotos para comprobarlo. Es, sin duda, una de las más radicales transformaciones físicas que se le recuerdan a un actor. Repasemos otras.

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NICOLE KIDMAN

Para encarnar a la novelista Virginia Woolf en 'Las horas' (2002), a la australiana le bastó someterse a un solo cambio: una nariz de látex que le alteró el rostro completamente. Al parecer, Kidman asistió a una proyección de la película previa a su estreno y se quedó a cuadros al descubrir que los espectadores no eran capaces de identificarla. Acabó ganando el Oscar.

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CHRISTIAN BALE

Perdió 30 kilos para interpretar a un insomne en 'El maquinista' (2004), y tuvo que pasar cuatro meses viviendo con agua, una manzana y una taza de café al día -aderezado con un trago de whisky ocasional-. Años después, Bale ganó 30 kilos para dar vida a un timador en 'La gran estafa americana' (2013). No hay forma de que volver a la báscula así de loca no deje estrías.

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BRAD PITT

En 'El curioso caso de Benjamin Button' (2008), metido en la piel de un hombre que envejece a la inversa -nace anciano y muere bebé-, echó mano del maquillaje y de los efectos digitales para transitar la totalidad del ciclo vital. Gracias a ello uno puede hacerse una idea sólida del aspecto que Pitt tendrá en la vejez… aunque es poco probable que encoja medio metro, como sucede en la película.

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TOM CRUISE

Cuando se estrenó 'Tropic Thunder' (2008), muchos espectadores ni siquiera se percataron de que Cruise aparece en ella. Pero sí: lo hace dando vida a un productor de cine tiránico y adicto a la Coca-Cola Light. Para interpretarlo se embutió en un traje de goma espuma, y se calzó una peluca calva y un par de manos prostéticas peludas y grandes como chuletones. Ojo al baile que se marca al final.

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WILLEM DAFOE

En el 'biopic' 'La sombra del vampiro' (2000), que recrea el rodaje del clásico del cine de terror 'Nosferatu' (1922) -versión libre de Drácula-, encarnó al actor Max Schreck, de quien los rumores dicen que en realidad era un vampiro. Para conseguir un aspecto tan siniestro, Dafoe necesitó a diario tres horas de maquillaje y una de desmaquillaje. Valió la pena: verlo pone los pelos de punta.

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CHARLIZE THERON

Caracterizada como la asesina Aileen Wuornos en 'Monster' (2003), apareció en pantalla con 15 kilos de más, las cejas afeitadas y una aparatosa prótesis dental, y recurrió al maquillaje para que su piel pareciera más ajada. También a ella el cambio físico -en su caso, aderezado de exceso histriónico- le proporcionó la estatuilla. A la Academia de Hollywood le encantan los disfraces.

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HUGH GRANT

Uno siempre espera verlo con camisa blanca y bebiendo capuchinos, así que fue chocante contemplarlo de esta guisa en 'El atlas de las nubes' (2012), en la piel de un caníbal violador. En la misma película, Halle Berry aparece oculta bajo kilos de potingues, un bigote ralo y una extraña pieza ocular incrustada en la cara, encarnando a un señor coreano muy mayor.