No hay países de nunca jamás

No paro de oír esta canción: hay una campaña orquestada desde Madrid para que Catalunya suene mal, a corrupción. Según este estribillo, de este modo se pretende pinchar el globo independentista para salir volando de España. Pues si existe esa campaña, yo no la acabo de entender. ¿Algún independentista de verdad va a dejar de serlo por la corrupción? Cada dos por tres, se descubren chanchullos en alguna parte del planeta. Es la globalización del chanchullo, que incluso está presente en países que no son moco de pavo democrático. Por no ir más lejos, en Francia llegaron a condenar a su expresidente Jacques Chirac. Y, que yo sepa, los franceses no reclamaron dejar de ser independientes para pasar a depender de un país sin corrupción.

Catalunya al margen, en España también hay corruptos. En cambio, me parece que nadie ha exigido que deje de ser un país independiente y pase a depender de un estado sin corrupción. Si España puede ser un estado independiente con corrupción, no acabo de pillar por qué alguien puede creer que la corrupción en Catalunya resulta que va a

influir tanto en los independentistas de verdad como para que desistan de volar.

Por cierto, para mí un independentista de verdad es aquel que está dispuesto a separarse de España aunque eso le suponga vivir peor, con más estrecheces económicas. Y un independentista de verdad que tenga además los pies en el suelo sabe que Catalunya no es ningún oasis. Ni Catalunya es el país de nunca jamás hay corrupciones, ni lo es el resto de España, ni casi ningún

otro sitio.

Otra cosa muy diferente es que la supuesta campaña orquestada desde Madrid intente influir en independentistas que no lo son por convicción, sino por interés (independentistas TAE) o en los que no viven en este mundo, sino soñando en un futuro país de dibujos animados.

Derecho a decidir

Si esa campaña logra influir en estos ciudadanos, igual hasta nos hace un favor, y acabamos sabiendo cuánta gente apoya por convicción una Catalunya independiente y realista y, por tanto, con corrupción, que es lo más normal del mundo, por desgracia. Aunque para saber todo esto, primero el derecho a decidir tendrá que convencer a los demócratas que han decidido que nunca se tenga ese derecho a votar.

Y otra canción que no paro de oír: en una Catalunya independiente no hubieran salido a la luz ni la mitad de los casos de corrupción que hay en los medios. En otras palabras: aquí casi todo quisque está comprado. Que lo demuestren. Que demuestren que somos los más corruptos de España.

Y si esas corruptelas no son delito, que cambien la ley y las conviertan en delito. Esa ley imagino que sí podrán cambiarla porque no es el derecho a decidir... Y, entonces, ¡a poner denuncias! ¡Y a ganar! Pero, si pierden, y sueltan que la Justicia también está corrompida, que lo demuestren también. Cuando se demuestre todo esto, voy a independizarme: me iré a Madrid a vivir con Bárcenas.