Sony deja de fabricar en España tras ceder su planta de televisores

«Sony no se va. Sony continúa en España». El presidente de la filial española de la firma japonesa, Pedro V. Navarrete, fue así de tajante al exponer ayer la situación tras cerrar un acuerdo para ceder su emblemática fábrica de Viladecavalls (Vallès Occidental) a las firmas catalanas de capital familiar Ficosa y Comsa Emte a partir del próximo 1 de enero.

Ficosa asumirá el 100% de una nueva sociedad que se ocupará de la actividad industrial y se creará otra sociedad, al 50%, con Comsa Emte, que se dedicará a desarrollo e ingeniería de distintos sectores que van desde la eficiencia energética a las energías renovables.

Los nuevos titulares de la fábrica se comprometen a quedarse con «la práctica totalidad» de la plantilla, formada por 1.100 empleados fijos con una media de edad de 35 años y de los que unos 200 son ingenieros. Del total absorbido, el 85% se dedicará a la fabricación (Ficosa) y el restante 15% a ingeniería e I+D (sociedad conjunta Ficosa y Comsa Emte).

Pese al optimismo de Navarrete, la operación culmina una historia de 40 años de actividad industrial de Sony en España. La compañía mantendrá solo la rama comercial y la de ingeniería e investigación y desarrollo (I+D) de televisores para Europa, sin concretar con cuánto personal propio y cuánto de subcontratas.

El presidente de Sony España admitió que la cesión de la capacidad industrial y de investigación, así como los activos de las instalaciones de Viladecavalls, cuyo importe no quiso desvelar, supone pérdidas para la compañía. Pero serán menores que si hubieran optado por un cierre drástico, explicó.

La nueva sociedad de manufactura (Ficosa) asumirá la producción de televisores de cristal líquido (LCD) para Sony hasta diciembre del 2012. Según el acuerdo, el vendedor se compromete a subcontratrar una carga de trabajo similar a la actual durante este periodo. Este año se han producido en las instalaciones 1,4 millones de unidades. El nivel de encargos hasta el 2012, que no desveló, será suficiente para facilitar una periodo de transición «suave» en materia laboral, dijo.

Navarrete consideró el proyecto «ilusionante» para los empleados de Viladecavalls y los miles de empleos indirectos que genera la planta. En su opinión, el acuerdo constituye un precedente de responsabilidad social en una situación de crisis. «Lo fácil para Sony hubiera sido una solución traumática» con despidos y cierre. Admitió que pueden haber excedentes de plantilla, pero «mínimos».

ALTO VALOR AÑADIDO / En el futuro, Ficosa fabricará productos de alto valor añadido para la automoción en los campos de la seguridad y la visión, con especial incidencia en los vehículos eléctricos; así como productos y aplicaciones de base electrónica para otros sectores, según la propia empresa. La proveedora del automóvil, propiedad de las familias Pujol y Tarragó, dice disponer de una buena situación financiera tras una inyección de 50 millones de la Generalitat, a través de un crédito sindicado, y la venta del 50% en una alianza con un socio alemán.

La empresa conjunta con Comsa Emte creará nuevos productos vinculados a la eficiencia energética, energías renovables, salud y ferrocarril o las telecomunciaciones, entre otros. Especializada en infraestructuras y tecnología, Comsa Emte es fruto de la fusión de los grupos familiares de los Miarnau (Comsa) y los Sumarroca (Emte). Factura más de 2.000 millones de euros al año.

Navarrete afirmó que la solución de traspasar las instalaciones a grupos locales es una alternativa que permite «que no se destruya el conocimiento acumulado durante 40 años». El representante de la compañía explicó que las pérdidas sufridas por Sony en el ejercicio fiscal del 2008 desembocaron en una reestructuración que afecta especialmente a televisores. Tras dejar de producir en España, Sony dispondrá de fábrivas en China, Malasia, Brasil y Japón.

Con anterioridad a Viladecavalls, abierta en 1991, Sony dejó de producir en las plantas de Les Franqueses y Parets (Vallès Oriental).