Pendiente del Espanyol

Agotada, y sin éxito, la primera opción de levantar la Liga, el Barça se encomienda a la segunda. Será el sábado en Cornellà cuando el Madrid visite al Espanyol. Y siempre le quedará la tercera y última opción dependiendo de sí mismo en el Calderón si gana al Atlético de Madrid para festejar una Liga que, según explicó ayer Sergio Busquets, vale«doble». Doble porque significa que la hegemonía azulgrana en España es indiscutible («ganar la cuarta en cinco años es algo espectacular», dijo el centrocampista) y, además, porque llegaría después de una doble dificultad: la enfermedad de Abidal y la enfermedad de Tito.

Anoche, el Málaga de Pellegrini no ayudó al Barça. Aunque, en realidad, ha sido el Barça quien se ha ayudado a sí mismo porque quedan cuatro jornadas de Liga y lo único que le falta es poner fecha a su alirón. Como dijo el propio Tito Vilanova el pasado sábado,«ya firmaría cada temporada estar en una situación así», dueño de su destino para conquistar una Liga que sería la segunda mejor racha en la historia del club, solo superada por eldream teamde Cruyff, que encadenó cuatro títulos consecutivos (1991, 1992, 1993 y 1994).

Desmentido del capitán

Después de ver, cada uno en su casa, que el Málaga de Pellegrini no podía llevarse ni un punto del Bernabéu, el Barça se pone a pensar en el duelo del domingo. Ayer, sin ir más lejos, el equipo retornó al trabajo. Con Pedro dentro del grupo, una vez recuperado de la gastroenteritis vírica que le hizo perderse el choque del domingo con el Betis. Mascherano todavía no se ha recuperado, pero ayer hizo una parte de la sesión con el grupo, mientras Valdés, aquejado de una fascitis plantar en el pie izquierdo, salió al césped de la ciudad deportiva de Sant Joan Despí, a pesar de que todavía no se sabe si estará a punto de reaparecer contra el Atlético. Puyol, por su parte, continuó con su rehabilitación.

Eso sí, envuelto el capitán en una extraña nebulosa sobre su futuro después de que se anunciara en Barcelona TV su intención de irse al Milan en junio, pese a que renovó con el Barça en enero hasta el 2016. Con Valdés aguardando su salida, si es posible al final de temporada mejor que en el 2014, a las 11.05 de la mañana de ayer, Puyol escribía un mensaje en su cuenta personal de Twitter. «Todas las informaciones que están saliendo son falsas. Solo estoy centrado en recuperarme bien y estar a tope para la próxima temporada». No usó el nombre del Milan en ningún momento ni tampoco el del Barça.

«Ojalá siga muchos años con nosotros. Lo veo bien, ya sabemos como es Puyi, hay que frenarlo siempre», aseguró Busquets, quien salió después en defensa de su compañero Iniesta, que había sido criticado por Mourinho.«No sabía que Mourinho era el único que podía hablar de todo», replicó el centrocampista, que está«mejor» de su lesión (molestias en el pubis), por lo que descarta ser intervenido ya que quiere acudir a la Copa Confederaciones con España.