Nàstic y Girona dependen de sí mismos para intentar el ascenso a Primera

Dos caras y una cruz en el fútbol catalán. Las victorias del Nàstic y el Girona hacen que dependan de sí mismos para seguir soñando con el ascenso, mientras que el Llagostera ya no tiene esperanza: este domingo ha bajado a Segunda B.

EL NÀSTIC NO FALLA EN LUGO (0-3)

Gran partido del Nàstic ante el Lugo, al que superó con goles de Mossa (m. 17), Emaná (m. 37) y Aníbal Zurdo (m. 93). Espectacular final de temporada del equipo de Vicente Moreno, que tras cosechar cinco victorias en los últimos seis partidos se asegura la tercera posición, con el factor campo a favor en caso de promoción, y luchará hasta la última jornada por hacerse con la plaza de ascenso directo que queda libre.

El Nàstic dependerá del Leganés, que visita al Mirandés en la jornada unificada del próximo sábado (20.30 h.). El Nàstic recibe al ascendido Alavés y, si todo se conjuga, logrará subir a Primera 10 años después. Mucho mérito para el equipo catalán, que partía a principios de temporada con el objetivo de mantener la categoría y que presentará candidatura al ascenso hasta el último minuto.

El bloque grana ha logrado ser el equipo menos derrotado de la categoría y llega en un momento excelente para encarar un final de campaña excitante. Manolo Reina, portero del Nàstic, volvió a parar una pena máxima que hubiera entrado en el partido al conjunto gallego.

EL GIRONA TAMBIEN DEPENDE DE SÍ MISMO (2-0 AL ALCORCÓN)

El Girona llegará a la última jornada dependiendo de sí mismo para disputar la fase de ascenso. Este domingo prácticamente eliminó a un rival directo como el Alcorcón (2-0) y se benefició del triunfo del Huesca en el campo de Osasuna (2-3). Eso sí, los de Machín se la jugarán en el Toralín ante una Ponferradina que está inmersa en la zona de descenso y que necesitará la victoria. Los de Machín no fallaron en un partido que tuvieron bajo control desde que Rubén Sobrino sorprendió a Dmitrovic con un derechazo (m. 17) y que corrigió un inicio titubeante de los locales. Los rojiblancos, con un buen ambiente en Montilivi (6.602 espectadores) no se dejaron sorprender en defensa y asestaron el golpe definitivo a su rival a un cuarto de hora del final con un gol de Cristian Herrera, que aprovechó el rechace de Dmitrovic después de un zurdazo de Granell.

PRIMER DESCENSO DEL LLAGOSTERA DESDE 1997

Lo tenía muy complicado el Llagostera para evitar el descenso, que se consumó. Ya no eran los cinco puntos que debía enjugar en dos jornadas, sino que era una obligación sorprender al Leganés en Butarque. Eso nunca es fácil, pero aún menos esta vez porque los madrileños se jugaban el ascenso directo, cosa que conseguirán si ganan el domingo en Miranda. Los de Oriol Alsina resistieron solo 11 minutos, el tiempo que tardó Gabriel Pires en batir a René. El Leganés tuvo el control ante un rival que pese a no perder nunca la cara no fue capaz de asustar. Los locales cerraron pronto el partido con el 2-0, obra de Miramón (m. 66). El Llagostera puso fin a una etapa gloriosa que le llevó a subir seis categorías en 10 años y a sobrevivir una temporada en Segunda. Su último descenso databa de la temporada 1996-97.