RETRIBUCIONES DUDOSAS DE LOS ALTOS DIRECTIVOS DE UNA ENTIDAD FINANCIERA

Banco Mare Nostrum destituye a Pagès y Troyano del consejo

Troyano, Pagès, y Caellas, de izquierda a derecha.

Troyano, Pagès, y Caellas, de izquierda a derecha.

MAX JIMÉNEZ BOTÍAS
BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El Banco Mare Nostrum (BMN) aceptó ayer el cese de Ricard Pagès y Manuel Troyano como representantes de Caixa Penedès en el consejo del banco y su sustitución por Manuel Vancells, presidente en funciones de la caja, y Ricard Banquells, secretario general. La destitución se produce después de que los dos primeros se vieran obligados a dimitir el pasado jueves como consejeros de la caja al conocerse que tenían un plan de pensiones, con otros exdirectivos, que superaba los 20 millones de euros, depositado fuera de la caja, y del que la mayoría de los miembros del consejo aseguran que no estaban informados.

La Fiscalía del Tribunal Superior de Catalunya ha abierto diligencias para conocer si se derivan responsabilidades penales por la actuación de los ejecutivos. También el consejo de administración del banco ha aprobado iniciar acciones par intentar recuperar los importes cobrados por los exdirectivos. La caja, por su parte, abordará esa misma cuestión el próximo jueves. En esa reunión, además, se nombrará al nuevo director general, que debe sustituir a Troyano. El nombramiento podría recaer en Banquells.

Pagès y Troyano, con otros exejecutivos de las caja, se autoadjudicaron un plan de pensiones asegurado con un importe bastante superior a los 20 millones de euros, que en su mayor parte estaba depositado en otra entidad. El plan de Pagès ascendía a 11 millones de euros y el de Troyano superaba los cinco millones. Además Jaume Jorba, exdirector de recursos humanos, tenía cuatro millones Joan Caellas, exdirector general -que fue obligado a dimitir en agosto pasado-, con menor antiguedad en la caja, contaría con un plan de un importe inferior, menos de dos millones. Fuentes del consejo añaden a Santiago Abella, exdirector general adjunto, como beneficiario de ese plan de pensiones del que habría acumulado cerca de cuatro millones. Abella se jubiló en el 2007.

Pagès dejó de cobrar nómina de la caja tras jubilarse recientemente, lo que los trabajadores interpretan como una estrategia para poder rescatar el plan de pensiones. Pero seguía vinculado a la caja como consejero, por lo que recibía dietas y, además, era miembro del consejo de adminitración de BMN, de donde también percibía dietas.