Directiva conflictiva

Mediaset ejecuta la salida de Mirta Drago de la dirección de comunicación tras dos décadas de desencuentros con los medios

Su relevo, Sandra Fernández, tendrá el difícil reto de dar un giro de 180 grados a la agresiva política de comunicación de la compañía

Mirta Drago

Mirta Drago

Ricky García

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La nueva cúpula de Mediaset, encabezada por el consejero delegado Alessandro Salem y el presidente Borja Prado, ha ejecutado la salida de Mirta Drago de la dirección de comunicación de la compañía, cargo al que accedió hace casi dos décadas de la mano de Paolo Vasile.

Su sustituta será Sandra Fernández, una profesional que conoce bien la televisión, en la que acumula una extensa trayectoria como directora de espacios de crónica social, entretenimiento y actualidad política como 'Salsa Rosa', 'Enemigos íntimos', ' La sexta noche', 'Un tiempo nuevo' y 'Aquellos maravillosos años', entre otros. En los últimos años ha trabajado en el gobierno de Isabel Díaz Ayuso.

La nueva directiva de Mediaset tiene ante sí un reto más que complicado: darle la vuelta por completo a la agresiva política de comunicación de la empresa, establecer una nueva estrategia basada en la transparencia, la honestidad, el respeto y la complicidad con todos los periodistas, sin mentiras ni vetos, para contribuir a remontar la mala imagen de marca que Telecinco arrastra desde hace años.

El trabajo de una gran parte de los periodistas especializados en televisión ha sido tremendamente complicado durante los años en los que Mirta Drago ha sido directora de comunicación de Mediaset. Su gabinete ha sido el único en el sector que ha aplicado vetos a periodistas incómodos, a los que no solo se ha impedido acceder a sus ruedas de prensa y entrevistar a los rostros del grupo, sino incluso recibir materiales corporativos. Desde hace años, esto no ocurre porque las notas de prensa se cuelgan directamente en su página web y cualquier persona tiene acceso a ellas.

A lo largo de estos años se han vivido movimientos en la sombra inaceptables que han comprometido el trabajo de muchos profesionales del sector y bochornosos gestos públicos, como cuando la dirección de comunicación de Mediaset saliente publicó un obsceno y humillante mensaje en la cuenta corporativa de la compañía en Twitter, señalando a periodistas con cuestiones personales. 

Los desmentidos de informaciones que minutos después se convertían en notas de prensa ha sido otra práctica habitual que muchos medios, entre ellos YOTELE, han tenido que soportar en los años de Mirta Drago como directora de comunicación. La respuesta a esta incomprensible actitud es que, lógicamente, muchos periodistas dejaron de llamarles, porque hacerlo era un problema más que una ayuda.

En un escrito publicado en la cuenta corporativa del grupo en Twitter, la ya exdircom se ha despedido de su puesto enumerando diferentes logros y acciones que se han llevado a cabo durante su mandato, sin un agradecimiento expreso a Paolo Vasile, que la nombró y la mantuvo contra viento y marea, a pesar de los numerosos problemas que a lo largo de los años ha generado por la poco empática gestión de la comunicación de Mediaset.